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En la Policía Nacional la comunidad del anillo sí existe (segunda parte)

En esta segunda entrega, LA F.m. revela las declaraciones de los jefes de los alféreces, que concluyen que en la Policía Nacional los mandos superiores sabían de las exisntencia de la comunidad del anillo, una red de prostitución de altos mandos con jóvenes en formación policial.

Publicado:
Actualizado:
Jueves, Enero 14, 2016 - 15:52

Escuche aquí el informe completo de LA F.m.


 



 


 


Luego de que LA F.m. revelara las primeras pruebas de la existencia de la llamada comunidad del anillo en la Policía Nacional y de que el cuestionado coronel Jerson Castellanos, señalado de ser el alto oficial que acosaba sexualmente a alféreces de diferentes compañías de la Escuela General Santander, negara dicha acusación y asegurara que no tuvo conocimiento de estos hechos y que en la Policía los altos mandos tampoco se enteraron de tal situación, LA F.m. tiene en su poder las declaraciones de los oficiales que eran, para la fecha de los hechos (año 2006), los jefes de los alféreces denunciantes.  


 


 



 


 


Dichas declaraciones, que ya han sido judicializadas, revelan cómo dos comandantes de la compañía Carlos Holguín se percataron de las irregularidades en las salidas de los jóvenes alféreces, algunos incluso menores de edad, transgrediendo los conductos regulares, para reunirse con el coronel Castellanos, jefe de enlace de la Policía Nacional en el Congreso de la República.


 



 


 


Los indicios


 


¿Cómo se prendieron las alarmas sobre lo que estaba ocurriendo en la Escuela General Santander?


 


En abril de 2006 el capitán Edwin Alejandro Orjuela, comandante de sección de la Compañía Carlos Holguín, notó la ausencia de dos alféreces. Este fue el origen del “destape” sobre lo que estaría pasando con los jóvenes aspirantes a cadetes. Esto dice un aparte de su declaración:


 


 





 


El capitán Orjuela y uno de su compañeros, el capitán Ospina, comenzaron a indagar, por iniciativa propia, sobre la situación y algunos alféreces les dieron indicios sobre un posible tema de prácticas homosexuales dentro de la Escuela, donde estaba involucrado un alto oficial; además manifestaron que un mayor era su enlace para lograr sacar  irregularmente a los alféreces de la Escuela. Así lo declara el capitán Ramos:


 





 


En la declaración, el capitán evela que en su investigación ha establecido otro caso de salida de otros cadetes.


 





 


El capitán Orjuela narra que se hicieron reuniones conjuntas de los comandantes de las diferentes compañías, con sus jefes superiores, lo que deja claro que el mando sí conocía de la situación. De igual forma, se pudo conocer que acordaron poner en conocimiento al coronel Álvaro Caro, entonces director de la Escuela, sobre lo que estaba pasando.


 





 


Continuando por su propia iniciativa con la investigación, el capitán Orjuela y el capitán Ospina citan a uno de los alféreces quien les confirmó que varios de sus compañeros habían recibido propuestas para tener relaciones sexuales con el coronel Castellanos a cambio de dinero y que el mayor Torres, no sólo sabia sino que era el enlace entre los jóvenes y el coronel. Aquí la declaración:


 





 


Finalmente, termina su declaración el capitán Orjuela exponiendo que desde el momento que detectó la situación y comenzó, motu proprio, a indagar, fue víctima de persecución dentro de la Institución.


 


Orjuela, quien fue sacado de la institución, logró que lo reintegraran y finalmente resultó involucrado en un caso de secuestro, del cual ha señalado un supuesto montaje con falsos testigos y hoy paga una condena de 28 años de prisión en la cárcel La Picota.


 


 


Más casos  de salidas para encuentros con el coronel Castellanos


 


Varias declaraciones de junio de 2006 confirman que los jefes de las compañías tuvieron conocimiento de las irregularidades e informaron a sus superiores. La declaración del capitán César Ospina confirma los hechos relatados por el capitán Orjuela y añade que también indagó por su cuenta y encontró nuevos casos.


 


Ospina relata que al capitán Ramos, en meses anteriores lo habían amenazado por hacer comentarios de comportamientos irregulares relacionados con homosexualidad dentro de la Compañía Bolívar.


 








 


El capitán Ospina ratifica que se había acordado poner en conocimiento de la situación al director de la Escuela, coronel Caro Meléndez. 


 





 



Finalmente, el capitán Ospina cierra su declaración con una situación en la que el coronel Castellanos estaría dispuesto a pedirles perdón a los alféreces con tal de evitar el escándalo. A continuación, los detalles:   



 





 


En la declaración de otro capitán, Rodrigo Ramos,  comandante de sección de la Compañía Simón Bolívar, se pueden evidenciar otros casos de alféreces evadidos de la Escuela para ser llevados con el coronel Castellanos.



 






 


De igual forma se reseña un episodio que causó mucha suspicacia en la oficina del coronel Castellanos en el Congreso de la República.   


 







 


Finalmente el capitán Ramos declaró que fue advertido para no meterse con el coronel Castellanos. “Mi mayor Torres una vez en el Casino de oficiales me comentó que no me pusiera a tocar callos con el Señor de la Séptima con Octava ya que él tenía mucho poder”.




 



A rendir declaración también fue llamado el mayor Salvador Gutiérrez, superior de los capitanes Orjuela y Ospina en la Compañía Carlos Holguín, donde confirmó los hechos expuestos por sus subalternos y añadió que hubo complicidad del mayor Torres para sacar, sin permiso, a los alféreces de la Escuela.


 






 



El enlace


 


El mayor Wilmer Torres Orjuela, comandante de la Compañía Francisco Jose de Caldas, señalado por los capitanes y alféreces de ser el hombre de enlace entre los jóvenes aspirantes a cadetes y el coronel Castellanos, también fue llamado a declaración.   


 






 


Más adelante aclaró cómo los alféreces Cortes y Arboleda resultaron en el Congreso de la República.


 





 


El mayor, que es escueto en sus respuestas, respondió en su declaración negativamente a varias preguntas.




 






 





Y remató con una defensa al coronel Castellanos.


 








 


El oficial de más alto rango que declaró


 


El teniente coronel Wilson Mosquera Díaz,  comandante de agrupación de Cadetes, fue el oficial de más alto rango llamado a declaración sobre estos hechos. En un aparte aceptó que sí dejó salir a los alféreces Cortes y Arboleda, y justificó por qué se saltaron los conductos regulares.


 





 


Al término de su declaración, el coronel Mosquera negó que esas salidas irregulares de alféreces hayan sucedido en otras ocasiones.



 



Fuente:
Sistema Integrado Digital