La historia detrás de la muerte de un bebé en la Clínica Esimed Materno Infantil
La enfermera que conoció el caso publicó una carta. Además, la Supersalud ya había advertido de lo acontecido.
Gran conmoción ha suscitado en el país el caso de Harold Nicolás Rodríguez Espinel, un bebé de 12 días de nacido que falleció, aparentemente, porque lo dejaron quemar dentro de una incubadora. El caso motivó un pronunciamiento de la Secretaría de Salud del Distrito, aparte de la carta de una enfermera que advertía lo que estaba sucediendo dentro de la Clínica Materno Infantil de Esimed, en Bogotá.
"La Secretaría de Salud suspendió temporalmente algunos servicios de la clínica Esimed Materno Infantil, luego de que un menor de 12 días de nacido falleciera por presuntas fallas en la atención. El cierre temporal se decidió luego de que se realizara una visita técnica al centro asistencial por las denuncias conocidas frente al caso del bebé fallecido", informó el Distrito.
Por incumplimiento de las condiciones básicas e indispensables para la prestación del servicio, definidas por el Ministerio de Salud y Protección Social, El Distrito informó que se procedió a suspender temporalmente la prestación de los siguientes servicios:
• Hospitalización general pediátrica
• Hospitalización general adultos
• Cirugía pediátrica
• Cirugía ginecológica
• Cirugía general
• Hospitalización obstétrica
• Cuidado básico neonatal
• Cuidado intensivo adultos
• Cuidado intensivo neonatal
• Cuidado intermedio adulto
• Cuidado intermedio neonatal
La Secretaría de Salud también informó que los pacientes de estos servicios deben ser trasladados otros hospitales, trámite que debe ser adelantado por la respectiva EPS.
¿Qué sucedió con el bebé? Las pesquisas están abiertas. No obstante, el diálogo con el abogado de la enfermera, sumado a la misiva que ella realizó, dan cuenta de que lo que allí aconteció era crónica de una muerte anunciada. Aníbal Rodríguez, abogado de la enfermera que renunció tras el caso, aseguró: "Lo más delicado es que no se trata de una situación puntual la situación del bebé, que desafortunadamente falleció. Es un hecho que ha venido siendo advertido. De hecho hay un informe de la Superintendencia de Salud del 22 de junio, que pone en evidencia y advirtiendo esto hace dos meses, graves fallas en su infraestructura, deficiencia de personal".
Tras esta aseveración, la Superintendencia Nacional de Salud fue consultada por tal informe y señaló que el documento al cual hace mención Aníbal Rodríguez "hace parte de un proceso de inspección y no es público". El abogado aseguró que el caso no era de la preocupación de la enfermera, únicamente, sino de toda la unidad de enfermeras.
"Las enfermeras habían puesto en evidencia, ante las directivas de la institución, problemas estructurales, pero nunca hubo ninguna observación de fondo", djo el letrado, quien aseguró que la enfermera ha sido objeto de acoso, matoneo, amenazas y persecución por parte de la clínica donde laboraba y tras dejar expuesto que había riesgos, que faltaban medicamentos, entre muchas otras anomalías.
La enfermera, que ha preferido mantener su nombre en reserva, le envió una carta a Hugo Méndez, gerente de Esimed. Allí, la jefe del turno nocturno de la Unidad de Cuidado Intensivo Neonatal de la Clínica Materno Infantil Esimed manifestó: "La falta de personal ha llegado al extremo que en el área de Unidad neonatal de cuidado intermedio B somos 1 jefe de enfermería y 2 auxiliares para 21 pacientes. De hecho, en el cuadro de rotaciones del mes de agosto se aprecia que faltan 3 jefes de enfermería y 5 auxiliares que estaban asignadas renunciaron y no se han reemplazado, utilizando personal de otras áreas que no tiene entrenamiento en la unidad".
"El trabajo de la UCI - B representa un alto riesgo para los pacientes como ocurrió con el bebé que fue quemado la noche del 22 de agosto, situación que se debió al mal estado de las incubadoras, las cuales: I) tienen dañados los sensores de temperatura; II) no cuentan con sensores de piel que encienden las alarmas sonoras de aumento en la temperatura; III) no disponen de las varillas de soporte de la bandeja donde descansan los bebés y que los separan de la plancha de calor IV) las bandejas tienen menores tamaños que la plancha de calor, dejando zonas expuestas que pueden producir quemaduras".
Esta es la carta completa