Avalancha en vía Bucaramanga-San Gil arrastró a 18 personas en sus vehículos
Por fortuna las 18 personas fueron rescatadas con vida.
Una creciente súbita que se presentó en la quebrada Pailitas, ubicada sobre la vía Bucaramanga-San Gil en el sector conocido como Boquerón, ocasionó una emergencia que involucró a 18 personas quienes fueron arrastradas por la avalancha cuando se movilizaban en sus vehículos.
El reporte entregado por las autoridades indica que ocho vehículos fueron remolcados por la fuerte corriente, que acompañada de lodo y ramas de árboles, volteó a varios automotores hacia el abismo.
El general Manuel Vásquez, comandante de la Policía Metropolitana de Bucaramanga, aseguró que por fortuna las 18 personas fueron rescatadas con vida y permanecen en centros asistenciales de la ciudad recibiendo atención médica.
"Pese al alto nivel de riesgo que aún mantenemos, podemos decir que es un balance positivo porque salvamos vidas, rescatamos a 18 ocupantes de 8 vehículos entre los que estaban dos menores de 4 y 10 años de edad, todos remitidos a centros asistenciales cercanos en donde reciben atenciones médicas", dijo Vásquez.
El oficial agregó que las Unidades de Operaciones Especiales en Emergencias y Desastres de la Policía Nacional, se mantendrán en la zona para descartar vehículos atrapados o personas desaparecidas.
"Tenemos que llegar a descartar que no existan más vehículos con personas en riesgo y que no hayan podido salir de ellos. Preliminarmente creemos que no hay más pero debemos verificar y seguir trabajando en la zona en donde se presentó la emergencia", agregó el general Vásquez.
La vía Bucaramanga-San Gil permanecerá cerrada por riesgo de nuevas emergencias como crecientes súbitas y deslizamientos de tierra, que puedan atentar contra los conductores que transitan sobre el kilómetro 76 del sector Boquerón y contra los habitantes de las parcelas aledañas.
La emergencia se presentó luego de un fuerte aguacero que cayó sobre Bucaramanga y su Área Metropolitana, situación que dejó pérdidas materiales en los vehículos que fueron arrastrados por la corriente de la quebrada Pailitas.