¿Cuáles son los daños psicológicos que puede sufrir un niño tras un secuestro?
Cristo José Contreras, de cinco años de edad, fue liberado este martes en Norte Santander tras siete días de secuestro.
El flagelo del secuestro genera incertidumbre por la salud mental de un menor que, en la mayoría de los casos, no logra comprender el porqué unas personas extrañas lo privaron de su libertad.
En el caso de Cristo José Contreras, el niño liberado en Norte de Santander, se desconocen los daños psicológicos que podría llegar a tener años más adelante, luego de haber estado secuestrado.
Diana Arévalo, madre del niño, manifestó en entrevista con La FM que en la primer noche en su casa después de la liberación, Cristo José logró conciliar el sueño, solo hasta las tres de la mañana.
"No quería dormir, luego empezó a llorar. No sé si de pronto tenía mucho miedo, porque no me dejó apagar la luz (...) Me tocó abrazarlo mucho. Repetirle muchas veces que lo quería, que lo estábamos buscando, porque él estaba llorando mucho y decía que lo habían secuestrado. El hermano también está muy afectado. Estoy preocupada por él. Estamos contemplando la posibilidad de llevarlo a un chequeo psicológico para que nos ayuden con un profesional", indicó Arévalo.
También reveló que Cristo José les contó que lo ponían a dormir en la selva y que solo veía a los secuestradores en horas de la noche.
Ante tan difícil experiencia vivida por el pequeño, La FM consultó a un especialista sobre los daños psicológicos que podría llegar a sufrir un menor víctima de secuestro.
De acuerdo con Juan Ángel Isaac Llanos, presidente de la Asociación Colombiana de Psiquiatría, "indiscutiblemente" el cerebro de un menor podría llegar a verse afectado por las secuelas dejadas por un secuestro.
"Habría que valorarlo, darle un soporte, un apoyo, y de acuerdo a lo que él vaya presentando, ayudarlo. No descartemos que si en algún momento necesita una ayuda coterapéutica, como pudiera ser farmacológica, pues habría que hacerlo o ayudarlo por intermedio de la familia", manifestó Isaac Llanos.
Además, el presidente de la Asociación Colombiana de Psiquiatría señaló que un menor también podría llegar a sufrir de eventos traumáticos, ante lo que pudo haber vivido.
"Ese temor exagerado, ese miedo propio de la edad y de lo que está pasando con unas personas totalmente extrañas, pues eso no pasa gratis; eso pasa a hacer daño en la salud mental", agregó.
En cuanto al tratamiento, Isaac Llanos explicó que cada caso es diferente y se debe evaluar de manera individual, "teniendo en cuenta que todo depende del "shock estructurado, del entorno y de la familia".