Dos erradicadores de coca fueron asesinados en el Valle del Cauca
Las personas asesinadas habían denunciado amenazas de muerte en el municipio de El Dovio.
Como Hover Alexander Orrego, de 35 años, y Edixon Panché Noscué, de 36, fueron identificados los dos líderes sociales asesinados en las últimas horas en el municipio de El Dovio, norte del Valle del Cauca.
Como Hover Alexander Orrego, de 35 años, y Edixon Panché Noscué, de 36, fueron identificados los dos erradicadores de cultivos ilegales asesinados en las últimas horas en el municipio de El Dovio, norte del Valle del Cauca.
Así lo confirmó la gobernadora del Valle, Dilian Francisca Toro, quien aseguró que estas personas venían adelantando procesos de restitución de cultivos ilícitos en esa zona del departamento, lugar que ha tenido influencia permanente de grupos ilegales al margen de la ley.
Al término de un consejo de seguridad realizado en Cali y encabezado por el Ministerio de Defensa, la mandataria seccional señaló que hace quince días, durante un encuentro en esa población, los hombres asesinados denunciaron amenazas de muerte, por lo que de inmediato se informó a la Unidad Nacional de Protección que aún no había destinado medidas de protección.
Al parecer, miembros del ELN estarían detrás del crimen de los erradicadores. Las amenazas también cobijan al actual alcalde de El Dovio, Rodolfo Vidal.
A raíz de la presencia de grupos al margen de la ley, dedicados al narcotráfico en varias regiones del Valle del Cauca, como también el incremento de los cultivos ilícitos y la comisión de otros delitos, el ministro de Defensa, Guillermo Botero, decidió reforzar el pie de fuerza en el departamento.
“Vamos a continuar con los esfuerzos que venimos haciendo en dos planes que tendrán una primera etapa; el primero la vamos a desarrollar en un periodo de 100 días, el cual se ha denominado ‘El que la hace la paga’, que está referido a la parte urbana, mientras que el otro plan, llamado ‘Plan Diamante’, está dirigido por las fuerzas militares y tiene su mayor asidero en el campo”, explicó el ministro.
Durante la reunión, de la que hicieron parte autoridades Militares y de Policía, Botero señaló que la conclusión más importante es establecer un plan en las principales ciudades de la región, especialmente en Palmira, para que la Policía tenga presencia constante.
Botero analizó también, por petición de la gobernadora Dilian Francisca Toro, la situación de orden público que se registra en la zona rural del municipio de Jamundí, que tiene un corredor hacia el Cauca, por donde se movilizan grupos al margen de la ley y persiste la presencia de narcotraficantes.
“También hubo otras peticiones, como la de aumentar la fuerza pública, además de aumentar el personal del CTI, para que las investigaciones fluyan muchísimo más rápido y podamos judicializar de mejor manera a aquellas personas que podemos coger en fragancia o que tienen orden de captura por parte de la Fiscalía General de la Nación o de cualquiera de las autoridades. También reforzaremos el 'Plan Atalanta' que tiene su eje en Cali”, agregó.
Se espera que en el transcurso de los próximos meses llegue un nuevo batallón al departamento, para apoyar dichas operaciones, por lo que se confirmó el aumento del control militar en las inmediaciones del Lago Calima.
En cuanto al reforzamiento del pie de fuerza, se estima que sean 1.000 hombres de la Policía Nacional los que arriben a esta zona del país en el corto plazo, para reforzar la seguridad.
Por su parte la Gobernadora del Valle se mostró agradecida con la presencia y la pronta atención del Ministro, ante las situaciones de orden publico presentadas en el departamento.
“La situación de Palmira, que ha tenido un aumento de homicidios en las últimas semanas, que llevó al Ejército a enviar un batallón de fuerzas especiales para contrarrestar allí la delincuencia, fue uno de los temas que más se habló y esto para nosotros es muy importante, que manden más pie de fuerza y se haga una estrategia que como él dice, aunque no se va hacer mañana mismo, si se empezará a trabajar en ello”, señaló la mandataria.
Otros hechos que durante este año han ocasionado problemas de orden público y sobre los que se trabajara de manera prioritaria, serán los enfrentamientos del Ejército con grupos al margen de la ley en el municipio de Florida, oriente del departamento.
Allí se han registrado combates en la frontera con el Cauca, debido a la presencia del ELN. Esta problemática también se registra en los límites del Valle del Cauca con el Chocó, donde reportan los crímenes de algunos miembros de comunidades indígenas.
“Esperamos que con todo este esfuerzo conjunto de la Nación, el departamento y los municipios, podamos lograr que el Valle del Cauca sea un territorio seguro, que es lo que queremos”, puntualizó la Gobernadora del Valle.