Masacre en Tumaco completa un año de impunidad

Un año después de la masacre en la vereda El Tandil, en Tumaco, Nariño, son pocos los resultados de las investigaciones, y aunque sí se han efectuado capturas al respecto, nadie ha sido condenado por la muerte de los ochos campesinos y las lesiones de 20 más.

“Recordamos este evento que nos duele porque fue una estrategia de criminales narcotraficantes que terminó afectando a quienes no deberían estar en esta condición”, dijo el general José Ángel Mendoza, subdirector de la Policía Nacional.

Además agregó que “creemos en el ejercicio de erradicación por lo que rechazamos lo que hizo la disidencia Oliver Sinisterra en contra de la comunidad”.

Frente a las investigaciones disciplinarias contra los 40 uniformados aseguró que avanzan positivamente en el interior de la institución y en la Procuraduría. Además, que por los hechos también cursan varios procesos en la Fiscalía General de la Nación, aunque ninguno ha dejado resultados concretos.

El episodio de ese 5 de octubre hizo que el Gobierno pusiera en marcha una de las operaciones más grandes para devolverle la seguridad a Tumaco. Se trata de la operación 'Perseo', que tiene como objetivo llegar a los cabecillas de primera línea y declarados como objetivo de alto valor; líderes del negocio del narcotráfico y además responsables del asesinato de algunos líderes sociales.

Pero 'Perseo' no solo busca neutralizar a los cabecillas de organizaciones ilegales, también pretende golpear sus finanzas que son producto del narcotráfico con apoyo de la Fiscalía General y liderada por la Dijín de la Policía.

Este plan cuenta con grupos de uniformados conformados por hasta 130 miembros cada uno, que suman 6 mil de Policía y FF. MM. También cuenta con un centro estratégico de operaciones no solo de inteligencia sino de antinarcóticos. Además de diez helicópteros Black Hawk y un avión de plataforma con capacidad de registrar imágenes a quince mil pies de altura.

Aunque las investigaciones pretenden establecer si el proceder de la Fuerza Pública fue el indicado, la Fiscalía no ha revelado hasta el momento si tendría responsabilidad. Así mismo se desconoce el paradero de las armas que fueron robadas a la Policía meses antes y que tendrían que ver con los hechos.