Militares aseguraron que cometieron asesinatos en Casanare por presión de comandantes
Aseguraron que sus subalternos eran incitados a incurrir en falsos positivos.
Durante la Audiencia de Reconocimiento de Verdad de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), un grupo de oficiales y suboficiales del Ejército, que para el periodo comprendido entre 2005 y 2008, tenían a su cargo grupos como contraguerrillas y batallones en Casanare, coincidieron en afirmar que dichos crímenes fueron cometidos por algún tipo de presión de sus mandos.
Aseguraron que sus subalternos eran incitados a incurrir en falsos positivos, motivados por el hecho de poder disfrutar de permisos de cinco, ocho y quince días.
Al respecto, el teniente retirado Marco García, aseguró que había sido presionado por las comandantes al momento de perpetrar estos asesinatos: "mi general Torres Escalante...nos exigían resultados operacionales; no capturas, eran simplemente bajas en combate".
Más noticias: Militares retirados revelan qué piensan sobre nuevos lineamientos en el Ejército
Hay que señalar que el mayor General (r) Henry William Torres Escalante, para la época fungía como comandante de la Brigada XIV del Ejército Nacional, en la cual, indicaron algunos de sus hombres, se enquistó la organización criminal responsable de los 212 hechos registrados entre 2005 y 2008, que dejó asesinadas a 296 personas civiles.
Asimismo, García dijo que gran parte de los casos de falsos positivos en Casanare se presentaron por estigmatización de la población.
Lea además: Militares deben reconocer su responsabilidad en 303 casos de falsos positivos ante la JEP
"Existía mucha estigmatización...habían muchos sectores del Casanare donde habían informaciones de muchas personas que pertenecían a grupos al margen de la ley...nosotros bajo informes de inteligencia recibíamos toda esta información", sostuvo el oficial en retiro.
Lamentó su error y aseveró que, "a través de todos estos hechos, quise ser un héroe, quise dar resultados, quise demostrar que era una verdadera guerra, quise demostrar que estas personas en realidad pertenecían a grupos al margen de la ley".
De otro lado, el teniente Edwin Toro, imputado por la JEP como máximo responsable, fue comandante del grupo especial Delta 5 y formó parte del Gaula Casanare. Toro participó en el asesinato de 17 personas que fueron presentadas como bajas en combate.
"Realicé una primera operación que era realizar un registro y control militar de área en cierto municipio. Cuando llego a ese municipio mis soldados retienen a un muchacho que tiene revolver y unos cartuchos", dijo el exmilitar.
Relató que sus subalternos se lo presentan y le indican: "Mi teniente, tenemos que matarlo, porque esto significa cinco días de permiso y ya nos mandan los camiones para podernos ir".