No solo “alimentaban” a muertos, sino un tutor reclamaba más de 130 raciones: Contraloría
A más de $2.500 millones ascienden las irregularidades que hasta ahora han sido detectadas en el programa de alimentación de niños.
Este fin de semana se destapó un escándalo con la entrega de raciones de alimentos a los niños de todo el país. La Contraloría General de la República encontró que unas 28 mil raciones de alimentos de contratistas del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF), fueron entregadas a 15.000 beneficiarios que, según la Registraduría, aparecen como fallecidos.
En diálogo con La FM, la directora de la Dirección de Información, Análisis y Reacción Inmediata de la Contraloría General (DIARI), María Fernanda Rangel, dijo que además de ello, a simple ojo lograron detectar que a un mismo número de identificación se le estaban entregando lotes de alimentos.
“Encontramos 28.000 entregas a más de 15.000 personas que aparecen fallecidas. Además que tenemos un riesgo relacionado con suplantación para la entrega, por ejemplo un mismo número de cédula con diferente nombre, una entrega a un niño que su identificación nos aparecía como fallecido”, advirtió.
Por ejemplo, en Chimichagua (Cesar) una mujer recibía alimentación para 172 "hijos" y en Atlántico había un tutor que recibía más de 130 raciones. "Cómo es que un tutor está reclamando más de 100 raciones, quién va a tener más de 100 niños. Un tío político en Buenaventura recibiendo 130 raciones (…) cuántos niños dejaron sin esas raciones y dónde están", señaló Rangel.
La directora del Diari cuestionó que se hayan llenado planillas con la misma cédula pero con diferente nombre y no se diera cuenta el operador, cuando a ojo los funcionarios de la Contraloría detectaron la duplicidad.
Según lo que hasta ahora han detectado, a más de 2.500 millones de pesos ascienden las irregularidades que se conocieron. "Esto son alertas porque no se ha concretado en hallazgo, de acuerdo a los contratos analizados, solo en tres meses llevamos más de 2.500 millones de pesos, pero en la baja ejecución, no han entregado alimentos a niños por $12.000 millones".
“Lo impactante es el número de beneficiarios y cuántas raciones no han llegado a nuestros niños. Uno de los casos de mayor impacto es el de beneficiarios fallecidos”, dijo la funcionaria.
En ese sentido, agregó que “los tutores iban a los centros zonales para reclamar las raciones de los niños y en el cruce de información que hicimos con la documentación proporcionada por el ICBF, de más de cien mil planillas que diligenciaron sus operadores, logramos identificar 28 mil entregas que se dieron beneficiarios a nombre de fallecidos”, alertó Rangel.
La Contraloría también detectó que en el país se hicieron 48 entregas de raciones a 21 menores de edad que, según la base de datos de la Registraduría, fallecieron en fechas anteriores a dicho suministro.
“Al ojo se podía evidenciar que había duplicidad y después ya entramos a hacer un trabajo mucho más profundo con tecnología llevando estas planillas diligenciadas a mano, transformándolas a un texto líquido y a una base de datos”, indicó Rangel.
Esa entidad señaló que en varios departamentos se identificó a una serie de tutores de menores de edad, quienes recibieron raciones lo que llevó a generar alertas sobre 1.970 beneficiarios.
Las alertas que identificó esa dependencia de la Contraloría, muestran entregas con documentos de personas reportadas como fallecidas, acudientes con múltiples beneficiarios y contratos con bajo índice de cumplimiento, entre otras irregularidades.
Entrevista en La FM con María Fernanda Rangel, directora del Diari de la Contraloría