Preocupados campesinos de Risaralda piden garantías para evitar que se pierdan las cosechas
El gremio solicita apoyo para comercializar independientemente sus productos.
José Alirio García, vicepresidente de la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC), aseveró que no es suficiente con que los gobernantes reconozcan la importancia del sector rural, como ha ocurrido en el actual tiempo de pandemia, sino que esas palabras se deben convertir en acciones que les permitan a ellos continuar realizando su labor.
Es por esto que, en el caso de Pereira, el líder propone crear una zona directa de descargue para que quienes cosechan en el campo puedan desplazarse a la ciudad y vender por sí mismos los frutos de su trabajo, que actualmente se están dañando en las fincas por la disminución en la demanda de los mismos.
Dicen que toda crisis trae algo positivo, "al menos el Estado se está dando cuenta de la importancia del pequeño productor, del campesino en la producción de alimentos y también se están dando cuenta del abandono en que están”, indicó García.
Y puso como ejemplo dicha situación afirmando que, “acá en La Bella, que es una despensa para Pereira, en este momento el comercio ha bajado y van a sobrar productos que vamos a tener que botar. Entonces, si lográramos que el Gobierno se de cuenta que con solo facilitarnos un sitio donde descargar los productos, organizar la comercialización y entregar a los tenderos, sería una gran ayuda para el campesino”.
El vicepresidente de la ANUC recordó el riesgo al que continúa expuesto el gremio debido a los procesos intermediarios que existen para la venta de las cosechas y que ha cobrado la vida de muchos en el territorio por intentar hacerlo de forma independiente.
“El problema es conocido muy bien por el Estado, el campesino no tiene cómo comercializar y cae en manos de los intermediarios, muchas veces inescrupulosos, que se aprovechan del campesino y del consumidor. Nos daríamos por bien servidos si nos permitieran organizarnos como productores y poder sacar directamente al consumo nuestros productos”, instó José Alirio García.
Esta solicitud la realiza debido a que, “el intermediario, cuando ve que el campesino empieza a entrar al mercado con sus productos, empiezan las amenazas y, para ser más franco, los asesinatos que se vienen presentando, para ser exagerados, hace siglos. Para nadie es un secreto que ese fue el caso de mi hijo”.
A pesar de la delicada denuncia, el líder rural afirma que en materia de seguridad las autoridades, “no pueden hacer nada porque eso es una mafia muy brava”, por eso propone alternativas que garanticen, respalden y fortalezcan directamente a quienes trabajan directamente la tierra.
En ese sentido, desde la Asociación Nacional de Usuarios Campesinos (ANUC) solicitan al Estado que, ante el valor que ha destacado del sector rural para el país, genere estrategias para que los campesinos puedan seguirla desempeñando y no se vean en la obligación de abandonar sus cultivos para salvar sus vidas.