El Barça completa su tridente
150 millones de euros golpean el mercado; se trata del segundo fichaje más caro de la historia.
El 'caso Dembélé', que provocó una crisis entre el Barcelona y el Borussia Dortmund, de cuya disciplina se ha apartado voluntariamente el francés para forzar su salida, parece llegar a su fin convirtiéndose en el segundo mayor traspaso de la historia.
El Dortmund fijó al Barcelona como fecha límite para pagar unos 150 millones de euros por el jugador de 20 años, que no entrena con el grupo desde el 10 de agosto, razón por la que quedó fuera de la convocatoria de la selección francesa.
"Nos acercamos a una decisión, pero por el momento no la hemos tomado. No somos el club que anuncia este tipo de cosas públicamente. Podemos únicamente decir que no hay acuerdo definitivo y el resto veremos", dijo el director ejecutivo del club alemán Hans-Joachim Watzke, añadiendo que decidirán "antes del 31 de agosto". Una postura novedosa después de dos semanas de tira y afloja.
- 150 millones -
El Barcelona, que tuvo que aceptar -contra su voluntad- el traspaso de Neymar al París Saint-Germain por 222 millones de euros, busca a toda costa reemplazar al brasileño antes de que el 31 de agosto se cierre la actual ventana de fichajes.
Y una de sus principales opciones era Ousmane Dembélé, que acaba contrato con el Dortmund en 2021. Vestir la camiseta azulgrana es uno de los sueños del futbolista desde que era pequeño, razón por la cual enseguida se mostró favorable a esta operación.
Los 'culés' hicieron una primera oferta de 80 millones de euros fijos más 25 de bonus. Ocurre que el Dortmund no tiene necesidad urgente de dinero y que, además, ve al delantero como uno de los principales valores de su proyecto.
Por ello puso el listón más alto y pidió al Barça unos 150 millones, lo que haría del francés el segundo futbolista más caro de la historia tras el brasileño Neymar.
Los dirigentes alemanes no estaban dispuestos a negociar esta cantidad. O el Barça paga la cantidad exigida o Dembélé se queda en Dortmund. Watzke refrendó esta postura. "Ni siquiera es necesario que nos hagan otra oferta", dijo hace días.
- Cerrazón -
Frente a la cerrazón del Dortmund el delantero se la jugó con una apuesta fuerte y dejó de acudir a los entrenamientos. Se declaró en rebeldía con el objetivo de forzar su salida. El 10 de agosto no se presentó en la ciudad deportiva del club y no alegó ninguna razón que justificase su ausencia.
Cortó además toda comunicación con el Dortmund durante varios días, hasta que se le localizó en Francia.
Según la prensa local, el futbolista sigue en su país y ha abandonado la casa que alquilaba en Dortmund (propiedad del entrenador alemán Jurgen Klopp), dejándola en un estado lamentable.
Pero ahí no termina todo. Watzke acusa al Barcelona, cinco veces ganador de la Copa de Europa, de manipular a Dembélé: "Hay que preguntarse sobre el papel que juega en todo esto el prestigioso FC Barcelona".
- Fuera de la selección -
En esa reunión "constatamos que nuestras posturas estaban muy alejadas y finalizamos el encuentro sin llegar a un acuerdo", indicó el directivo, añadiendo que fue entonces cuando Dembélé cortó toda relación con su club.
"Ousmane simplemente ha decidido no hacer su trabajo. Se puso en huelga y fue suspendido. Después el jugador ni siquiera ha pedido que le levanten la sanción".
Por último, en la convocatoria hecha pública por el seleccionador galo, Didier Deschamps, no figuraba Dembélé. Francia disputa dos partidos de clasificación para el Mundial 2018, contra Holanda (el 31 de agosto) y contra Luxemburgo (3 de septiembre).
"He hablado con él y me ha dicho que espera que esta situación pase cuanto antes. Lo que molesta es que haya decidido quedarse al margen. Hay otros futbolistas susceptibles de ser fichados que siguen entrenándose con sus clubes", agregó el técnico.
"Ousmane hace quince días que no se entrena, está a la espera de un posible traspaso, probable, que puede que se haga o que no... No se concibe convocar a un jugador en inactividad durante 15 días", añadió.