Revelado el salario de Maradona en Dorados de Sinaloa
El argentino será presentado este lunes como técnico del equipo mexicano.
Aún no se ha presentado Diego Armando Maradona y la polémica está a la orden del día por el salario que devengará el argentino como entrenador de un equipo de segunda división que cabalga en la decimotercera casilla con solo tres unidades.
Y es que el ‘Pelusa’ no pasará inadvertido por el balompié mexicano, tanto por su temperamento como por los beneficios económicos que tendrá. De acuerdo al diario Récord, el sueldo del nuevo estratega de los ‘Delfines’ será de 150 mil dólares, tras firmar un contrato que lo ligará por los próximos once meses.
En total serán 1.6 millones de dólares los que se ganará Maradona para convertirse en el segundo técnico mejor pagado del fútbol ‘azteca’, escoltando a Ricardo el ‘Tuca’ Ferretti, adiestrador de Tigres e interino de la selección mexicana, el equipo con mayor número de títulos durante las últimas temporadas.
Lo curioso del caso es que Maradona tendrá menos salario del que iba a recibir como presidente del Dinamo Brest de Bielorrusa, club que asegura que Maradona aún no se ha desligado de su cargo. Según el propio Récord, el salario del argentino como directivo era de 20 millones de euros por tres años.
Volver al país de la consagración
Meta profesional aparte, llegar a México para dirigir desde mañana a los Dorados de Sinaloa de la división de Ascenso del fútbol local, es para Diego Armando Maradona el regreso al sitio donde hace 32 años dio su mejor beso.
"Este es el beso de mi vida", reconoció el año pasado el argentino al referirse a la foto en la que posó sus labios en la superficie del trofeo de la Copa Mundial luego de ganarle la final 3-2 a Alemania en el estadio Azteca el 29 de junio de 1986.
Fue el momento más hermoso de la carrera del "Pibe de oro", que si bien marcó una época con goles artísticos en el Barcelona español y el Napoli de Italia, fue en México donde experimentó su mayor felicidad en compañía de sus compinches Valdano, Pumpido, Ruggeri, Brown y Burruchaga, el del gol decisivo en el minuto 84.
Como luego le pasó en varias relaciones con mujeres, aquel verano Diego empezó una relación de amor y de desprecio con México, un sitio donde una vez fue venerado, en otras ridiculizado y en unas terceras fue visto casi con odio.
Una de las historias de más color sucedió en el año 2002. El delantero mexicano Carlos Hermosillo invitó a Maradona a su partido de despedida como jugador. El "Pibe" llegó tarde y al pisar el estadio Azul pidió una pizza como condición para saltar a la cancha.
Esa vez hubo burlas de varios hinchas a la baja forma física del argentino y cuando los medios publicaron el cuento de la pizza, dijeron que a sus 41 años, su cuerpo parecía de 60.
Mucho tiempo antes, en 1990, Diego vivió uno de los momentos de más enojo en su vida y también tuvo que ver con México, o más bien con un naturalizado mexicano, el árbitro Edgardo Codesal, quien pitó el penalti con el que los alemanes le arrebataron el título a los argentinos en el Mundial de Italia.
Diego jamás le perdonó al oficial haber decretado la pena máxima y por muchos años sangró por la herida aunque ya no suele hablar de aquel revés, tan duro como el de cuatro años después cuando dio positivo de dopaje en el Mundial 1994.