Freddie Mercury, una voz que la muerte no logró apagar
Este 5 de septiembre Freddie Mercury, vocalista de Queen, cumpliría 72 años.
De no haber sido por una muerte temprana, en el apogeo aún de su carrera musical, Freddie Mercury habría cumplido 72 años, ocasión celebrada estos días con un repaso a su también variada obra en solitario, que empezó una semana antes del propio debut de Queen.
Fue en 1973 cuando, con los miembros de la banda como soporte y bajo el seudónimo de Larry Lurex, lanzó "I can hear music", una versión de un tema de The Beach Boys, con una cara B titulada "Goin' back", que estaban a disposición del público desde el lanzamiento de un álbum especial por el 60 aniversario de su nacimiento.
Diez años después, la iniciativa se repite. En versión doble CD, digital y como una caja de vinilos coloreados de siete pulgadas y edición limitada, regresan al mercado todos los sencillos que publicó sin Queen bajo el título de "Freddie Mercury: Messenger of the Gods - The Singles".
A través de esas 13 canciones, es posible aislar aquello que hizo de Farrokh Bulsara (su nombre auténtico) un artista, compositor, cantante y músico simpar, autor de dos álbumes que, si bien no adquirieron la misma relevancia que su trabajo con Queen, merece la pena revisar: "Mr. Bad Guy" (1985) y "Barcelona" (1988), junto a Montserrat Caballé.
La soprano recordaba tras su muerte que fue su calidad vocal uno de los aspectos que más lo significaron, como probó su puesto 18 en la lista de los "100 mejores intérpretes de la historia" para la revista Rollig Stone. Fascinaban su técnica, su vibrato, su facilidad para oscilar entre notas y registros, de su tono de barítono al de soprano, siempre en tiempo.
Como autor, Mercury compuso 10 de los 17 mayores éxitos de Queen: "Bohemian Rhapsody", "Seven Seas of Rhye", "Killer Queen", "Somebody to Love", "Good Old-Fashioned Lover Boy", "We Are the Champions", "Bicycle Race", "Don't Stop Me Now", "Crazy Little Thing Called Love" y "Play the Game".
De su gusto por la mezcla desprejuiciada de estilos dan prueba sus influencias tempranas, divididas entre Cliff Richard (el autor entre otros del eurovisivo "Congratulations") y el electrizante Little Richard.
Del mismo modo, su capacidad dramática y su magnetismo sobre el escenario están fuera de discusión. El mismísimo David Bowie dijo de él que "llevó el concepto de rock melodramático más lejos que ningún otro intérprete de rock". Además, añadió, "siempre he admirado un hombre capaz de vestir mallas ajustadas".
Descendiente de parsis y nacido en el sultanato de Zanzíbar, entonces un protectorado británico, hoy parte de Tanzania, Mercury se crió entre esta región y La India hasta que, en plena adolescencia, se mudó con la familia a Inglaterra, donde estudió arte.
Plenamente consciente de las connotaciones ambiguas que transmitía el nombre, fue él quien eligió llamar "Queen" (reina) a la banda que en 1970 formó junto a Brian May y Roger Taylor, pese a las reticencias de sus representantes.
Fue en esta época cuando también eligió el apellido Mercury y cuando diseñó el logo del grupo combinando los signos zodiacales de sus cinco miembros.
Once discos con Queen y una década después, en 1984, volvería a probar suerte en solitario con "Love kills", una colaboración con el productor italiano de música disco Giorgio Moroder para la reedición de la banda sonora de la película de 1927 "Metropolis".
La experiencia en solitario devino solo un año después en su primer disco en solitario, "Mr. Bad Guy", que le impulsaba por la misma senda bailable, como demuestra "I Was Born To Love You" o y "Living On My Own", en contraste con las más melancólicas "Made In Heaven" y "Love Me Like There's No Tomorrow".
De su gusto por Elvis Presley surgiría en 1987 una versión de "The great pretender" que ayudó a poner el tema de nuevo al día y que contó con uno de los vídeos más recordados de su carrera. Mercury contaría después que era así, "como el gran farsante", como se sentía sobre el escenario.
"Oh, sí, soy el gran farsante, simulando que lo hago bien, mi necesidad es tal que aparento demasiado, estoy solo pero nadie lo diría", cantaría al público, en una letra que merece la pena leer en inglés para entender la dimensión de la canción como manifiesto personal.
Justo tras "The great pretender", se manifestó en sus grabaciones su gusto por la ópera, que cuajaría en "Barcelona", el célebre dueto con Caballé. Con este tema, inclasificable en su estilo, pondría sintonía a los Juegos Olímpicos de la Ciudad Condal, aunque él nunca llegara a verlo. Falleció el 24 de noviembre de 1991, a unos meses del evento, por una neumonía que contrajo a causa del sida.
A pesar de la partida de Freddie Mercury, una de las voces y personalidades más carismáticas de la música, su marca quedó impregnada en numerosos artistas que, siendo entonces niños, han mantenido vivo su legado. Estos son los diez que mejor encarnan a la "reina del rock".
GEORGE MICHAEL: Tenía 38 años y dos discos publicados en solitario, incluido "Faith", cuando en 1991 la voz de Queen se apagó. Británico y de familia inmigrante como él, cantó "Somebody to Love" en el homenaje que se le rindió en Londres, en sus propias palabras, "el momento más increíble" de su carrera. Fue uno de los primeros que se barajó para sustituirle.
ROBBIE WILLIAMS: La estrella masculina más irreverente del pop y músico más galardonado de Reino Unido es probablemente el que más se acerca al genio de Zanzíbar en su faceta de "animador", fuente de provocación y animal de escenario. Él hace gala de ello y en sus giras ha llegado a versionar "Bohemian Rhapsody".
ADAM LAMBERT: Estadounidense, ex participante de "American Idol", homosexual declarado y enormemente desvergonzado, realiza actualmente las funciones de Mercury como voz de Queen, algo de lo que no va exento (es capaz de cantar todas las notas de una guitarra y su rango vocal alcanza tres octavas y seis semitonos). "Estoy seguro de que Freddie aprobaría a Adam", dijo Brian May de él.
PAUL RODGERS: Antes que Lambert, el artista más veterano de esta lista (66 años) y vocalista de Bad Company ya recibió la encomienda de ocupar la vacante dentro de Queen entre 2004 y 2009. Mencionado en el puesto 55 del ránking "Los 100 Grandes Cantantes de Todos los Tiempos" de Rolling Stone, era además "uno de los cantantes favoritos de Mercury", según el batería Roger Taylor.
MATT BELLAMY: Tenor, como él, en los agudos lacerantes del vocalista de Muse es fácil vislumbrar la sombra de Freddie Mercury, pero también en su forma de componer al piano, no en vano, en discos como "Resistance" y "The 2nd Law" se incluyen melodías inspiradas por canciones de Queen.
GERARD WAY: El intérprete de "Love of my life" fue también la principal inspiración de My Chemical Romance, la banda de rock alternativo y "emo" que lideraba este músico, que ha citado a Mercury como referencia personal por su ambigüedad sexual. Way recibió incluso una invitación de May para interpretar "We will Rock You" junto a Queen durante una edición del festival de Reading.
MIKA: Otro británico de aspecto racial (tiene orígenes libaneses), homosexual y dotado de un prodigioso rango vocal de tres octavas y media, el espigado intérprete es algo así como la versión colorida de Mercury y considera "un honor" esta comparación recurrente. "Lo más interesante es que Mercury vivía en la esquina de al lado de mi casa, ¡y tenemos el mismo jardinero!", contó.
BRENDON URIE: Si alguien duda que el vocalista de Panic! At The Disco podría aspirar al trono de Mercury, que disfruten en internet de la versión de "Bohemian Rhapsody" que hizo hace años o de la que recientemente grabó para la BSO de "Suicide Squad". Además, como es bien sabido, es otro entusiasta de la dimensión de espectáculo que tiene la música.
BRANDON FLOWERS: Otro apasionado del espectáculo, como buen hijo de Las Vegas, es el vocalista de The Killers, que ha citado a Mercury como una de sus grandes influencias y llegó a presumir durante años incluso de bigote, aunque rehúso actuar "tan escasamente vestido" como lo hacía su ídolo.
LADY GAGA: ¿Podría no estar en esta lista alguien que homenajea en su nombre artístico uno de los más célebres temas de Queen? La similitud en las armonías vocales de Stefani Germanotta con las de Mercury, al que "adoraba como artista único", propició el pseudónimo de la única mujer de esta lista, compositora, pianista e intérprete sólida y versátil con gran querencia por el disfraz.