Las estrictas medidas de seguridad que prepara Nueva York para el Año Nuevo

Nueva York se prepara para dar la bienvenida al 2025 con el icónico evento de Año Nuevo en Times Square, una celebración que atrae a millones de personas de todo el mundo. Este año, las autoridades han anunciado un robusto plan de seguridad para garantizar la tranquilidad en este multitudinario evento.

Los asistentes que deseen disfrutar del descenso de la famosa bola en Times Square deberán pasar por rigurosos controles de seguridad ubicados en las avenidas Sexta y Octava, según informó ABC7. Entre las restricciones destacan la prohibición de mochilas, envases de vidrio, alcohol y bolsas grandes. Además, las autoridades aseguran que “no existe ninguna amenaza creíble hasta el momento para el evento”.

Eventos recientes a nivel global, como el ataque en un mercado navideño en Alemania, han llevado a las autoridades a reforzar los protocolos de vigilancia. “Estos incidentes nos recuerdan los riesgos asociados con reuniones masivas”, declaró el alcalde Eric Adams en una conferencia de prensa. El Departamento de Policía de Nueva York (NYPD) ha anunciado que se instalarán vehículos bloqueadores, barreras de concreto y otras medidas para proteger a los asistentes. Rebecca Weiner, subcomisionada de inteligencia y contraterrorismo, destacó que el NYPD considera estos eventos como potenciales objetivos y trabaja para minimizar cualquier riesgo.

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Según un boletín policial citado por ABC News, “los agentes están preparados para manejar protestas, incluso aquellas relacionadas con conflictos internacionales como el de Israel y Hamas”. La comisionada Jessica Tisch informó que se desplegarán unidades especializadas, perros detectores, drones y personal encubierto para garantizar una respuesta inmediata ante cualquier eventualidad. “Si alguien detecta algo fuera de lo normal, es vital que lo reporte de inmediato”, subrayó Tisch.

En cuanto a amenazas locales, Weiner mencionó los esfuerzos del NYPD para contener actividades delictivas relacionadas con pandillas como el Tren de Aragua. Aunque afirmó que esta organización no representa una amenaza directa para las celebraciones de Año Nuevo, aseguró que “se están abordando patrones de crimen emergentes para evitar que estas pandillas ganen terreno en Nueva York”.

La logística del evento no se limita a la seguridad. Una de las tradiciones más esperadas, el lanzamiento de 1.364 kilogramos de confeti, incluirá mensajes y deseos enviados por el público al pozo de los deseos virtual en Times Square. Además, ceremonias previas como el Good Riddance Day, donde los residentes eliminan simbólicamente los malos momentos del año, ya han dado inicio a las celebraciones.

El alcalde Adams enfatizó la importancia cultural e histórica del evento, destacando que este Año Nuevo coincide con el 400º aniversario de la ciudad. “Esta celebración es una muestra de nuestra resiliencia y nuestra visión de un futuro prometedor”, declaró, y añadió que Nueva York ha recibido 65 millones de turistas este año, consolidándose como un destino líder.

Con una asistencia estimada de más de un millón de personas, la seguridad será una prioridad absoluta. Las autoridades han confirmado la presencia de miles de agentes, además de patrullas en azoteas, helicópteros de rescate y tecnología avanzada como drones para monitorear el evento en tiempo real. Según Kaz Daughtry, comisionado adjunto de operaciones, estos dispositivos ayudarán a identificar “anomalías”, como emergencias médicas o comportamientos sospechosos.

El Times Square Alliance, coorganizador del evento, aseguró a través de su presidente, Tom Harris, que “la colaboración entre agencias garantiza una experiencia segura y memorable para todos los asistentes”. Las celebraciones iniciarán a las 18:00 (hora local) con presentaciones musicales, culminando con el descenso de la bola a medianoche.

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A pesar de los pronósticos de lluvias esporádicas, los organizadores invitan al público a planificar con anticipación y recordar que elementos como paraguas o sillas no están permitidos en las áreas designadas. Con el despliegue de 600 nuevos reclutas del NYPD y un enfoque en la participación ciudadana, las autoridades confían en que este evento será un éxito.