Louis Vuitton se alía con la marca 'skate' Supreme en su colección masculina
En la moda, pocos refranes valen más que "renovarse o morir", como demostró hoy Louis Vuitton, que con más de 160 años de historia ha colaborado en su última colección masculina con una de las marcas más comerciales y apreciadas del momento, Supreme.
Una unión en pasarela para festejar el estilo neoyorquino, pilar de una línea que apostó por un look urbano, cómodo y cosmopolita, pero sobre todo polifacético para poder acaparar la atención de todo tipo de hombre.
En esta segunda jornada de la semana de la moda de París, en la que se presentan las colecciones masculinas para el próximo otoño-invierno, Vuitton (y Supreme) revisionaron el famoso logo "Monogram", que acaparó no solo accesorios como bolsos y pañuelos, también cazadoras y camisas vaqueras o con estampado camuflaje.
Para Kim Jones, director artístico de la línea masculina de la 'maison', es una "oda a la multitud de estilos" que coexisten en Nueva York, como indicaba el nombre con el que el británico bautizó la colección: "Friends and Heroes" (amigos y héroes, en español).
Más que de formas y volúmenes, se trata de actitud, aunque la de Vuitton fue elegante pero sin forzarlo: pantalones amplios con bastante caída, camisas de seda con un aire a las de pijama, camisetas que imitan las equipaciones de baseball y gabardinas de piel o chaquetas de cocodrilo para protegerse del frío.
Jones es un auténtico seguidor de la firma Supreme, fundada en Nueva York en los años 90, que ha acompañado la escena punk rock y hip hop de los últimos 20 años gracias en parte a colaboraciones con artistas como Jeff Koons y marcas como Nike o Levi's.
La de Louis Vuitton será difícil de olvidar y en particular los accesorios, como las maletas de mano y bolsos de la casa, en piel roja con el 'Monogram' y el logo de Supreme, prometen ser un éxito en ventas.
Este proceso de unir pasado y presente es uno de los retos a los que se enfrentan los jóvenes diseñadores al frente de firmas centenarias, como también es el caso de Loewe, que se decantó por una presentación en sus oficinas de París para mostrar la nueva línea masculina.
El británico Jonathan Anderson quiso crear en esta ocasión una "fantasía adolescente" sobre lo que significa vestirse sin ataduras hoy en día.
Para ello recuperó una estética industrial en un meticuloso proceso de unión entre la anarquía de la juventud y el cuidado por los detalles, algo que siempre está presente en la marca y en especial en las líneas masculinas.
Jerséis de punto grueso, vaqueros con doble vuelta estilo pescador, combinan con cazadoras deportivas y zapatos de suela ancha en estampado tartán, además de una divertida línea de abrigos de pelo de colores y diseños estampados.
Anderson intentó además democratizar ciertas prendas incluyendo varias camisetas básicas con logos o impresiones gráficas, así como pequeños accesorios, como llaveros de piel con forma de animales o mini bolsos y carteras intercambiables.
El británico defiende que la moda pueda lanzar mensajes políticos: "Parece que operamos dentro de burbujas", dijo a Efe durante la presentación, reclamando la necesidad de crear una moda que hable a todos. "Si no, ¿qué sentido tiene?", añadió.
Al margen de pequeños atrevimientos en marcas más alternativas, la gran mayoría de diseñadores en moda hombre sigue apostando por ropa fácil de llevar, como Issey Miyake.
La colección fue un canto a la sencillez con jerséis de cuello vuelto en tonalidades oscuras -principalmente grises, azules y negro- y pantalones de pinzas a juego; mientras que, por encima, gabardinas y guardapolvos se llevaron en tejidos impermeables, satinados y con algunas notas de color, como un brillante azul añil.
"Es muy importante para nuestra marca pensar en que el diseño sea fácil de llevar, ligero o que abrigue", explicó a Efe el diseñador Yusuke Takahashi.
A pesar de la sobriedad de la colección, Takahashi introdujo un estampado algo más estrafalario, con líneas de colores difuminadas en pantalones y abrigos de forma más discreta en el forro de las chaquetas.
Con información de EFE