Acné: ¿cómo cuidarse la piel?
El acné es una afección frecuente de la piel que se presenta en gran parte de la población.
El acné es una afección frecuente de la piel que ocurre cuando los folículos pilosos debajo de esta se obstruyen con grasa y células muertas de la piel, lo que provoca la aparición de lesiones en la piel, como granos o espinillas.
Los brotes de lesiones suelen aparecer en la cara, pero también pueden salir en la espalda, el pecho y los hombros.
“El gran problema de esta enfermedad, es que se trata de una afección crónica. Muchos de los pacientes recaen una y otra vez y esto afecta sobremanera en su calidad de vida. Uno de cada cinco de ellos genera cicatrices, que, en muchos casos, también pueden ser emocionales”, afirmó la doctora Mónica Noguera, médica dermatóloga e internista de nacionalidad argentina, coordinadora de la sección de Acné en el Hospital Universitario CEMIC de Buenos Aires .
Le puede interesar: Dermatitis Atópica: ¿cómo afecta a los niños?
La experta recomendó abordar a cada paciente de manera personalizada, ya que ningún paciente es igual a otro.
“El 80% del riesgo de tener acné depende de variantes genéticas. Recordemos que muchas veces la afección no viene sola, sino que puede portar genes de susceptibilidad a distintas enfermedades psiquiátricas, inflamación intestinal, trastornos hormonales, metabólicos, entre otros. Asimismo, hoy se cuenta con evidencia acerca de los factores epigenéticos y cómo éstos pueden producir cambios en el ADN, lo que vuelve al acné más resistente. Está en nosotros como profesionales de la salud el evitar o limitar estos factores”, comentó.
Resaltó la importancia del microbioma, la flora bacteriana normal de la piel, ya que no sólo se debe tener en cuenta el impacto de éste en la generación del acné, sino en cómo impacta el microbioma en los tratamientos y viceversa.
Explicó que se puede dar cuidado al microbioma, con la incorporación de una rutina con dermocosméticos, además de evitar o restringir el uso de antibióticos y la priorización de alternativas eficaces como el uso de la isotretinoína.
“Una rutina de cuidados, con dermocosméticos, es fundamental como parte integral del tratamiento, desde pacientes con acné leve, pasando por moderados y hasta severos. Los dermocosméticos nos ayudan a restaurar y mantener, en forma sana, la barrera cutánea y el microbioma que están íntimamente relacionados. Todo esto siempre bajo la supervisión de un profesional de la salud", indicó.
Lea también: Los signos de alarma de un mal estado de los riñones
Además, se recomienda mantener una limpieza facial adecuada, pero igualmente importante es no perturbar el equilibrio natural del microbioma cutáneo. Usar limpiadores suaves y evitar productos que contengan alcohol puede ayudar a mantener una piel sana.