Por: Inaldo Pérez Castillo
Los llanos, un paraíso colombiano
La esencia de la cultura llanera gira en torno al sentir del llanero y todo lo que se circunscribe a su diario vivir.
Las inmensas sabanas llaneras poseen una cantidad de ecosistemas, se puede apreciar diversidad de paisajes y ejemplares animales.
Los mautes, el ganado de cría, las novillas (vacas jóvenes) y los toros son divididos en los potreros para facilitar el trabajo del hombre llanero.
La gastronomía es variada, entre sus platos típicos está la ternera, la llanera o mamona, que se prepara asando unos cortes típicos de ternera en un horno de barro, durante todo un día.
Otra de las faenas es el pastoreo del ganado, en estas tierras la ganadería es el eje fundamental de la economía, por eso se toman las previsiones necesarias para el cuidado de estos animales.
El hombre llanero es mestizo, luchador por naturaleza, alegre, dicharachero y parrandero, forma su hogar muy joven, y cree en mitos y leyendas.
Uno de los momentos más hermosos de los llanos son sus atardeceres y amaneceres, llenos de colorido y ese tono cálido del sol cuando se oculta tras la llanura verde.
Los Llanos Orientales comprenden los departamentos de Arauca, Casanare, Vichada y Meta.
Entre los destinos Turísticos se destacan Villavicencio o el impresionante Caño Cristales.