Diálogo en Venezuela avanza y ambas partes acuerdan desterrar la violencia

La segunda plenaria de la mesa de diálogo que fue instalada formalmente en Caracas el pasado 30 de octubre concluyó luego de dos días de deliberaciones con cinco acuerdos que leyó ante periodistas el enviado del Vaticano para estos asuntos, Claudio María Celli.

El prelado indicó que tanto el Gobierno del presidente Nicolás Maduro como la alianza opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) adoptaron una declaración conjunta llamada "Convivir en paz" donde acuerdan pacificar la política, evitar el odio, la amenaza y el insulto; "desterrar" la violencia en general.

Las partes se comprometieron "solemnemente" a resolver sus diferencias políticas "en el estricto marco constitucional, un camino democrático, pacífico y electoral", según indica el texto leído por los jefes de las delegaciones: Jorge Rodríguez por el Gobierno y Carlos Ocariz por la MUD.

"Hoy queremos hablar desde una condición para reconocernos y promover el consenso, la de ciudadanos de Venezuela, compatriotas, el bien común que está por encima de nuestras legítimas diferencias", reza la declaración conjunta.

Ambas facciones acordaron además la "adopción de medidas orientadas al abastecimiento de medicamentos y alimentos" que escasean en el país caribeño, así como poner en práctica una hoja de ruta "que permita normalizar la relación constitucional entre los poderes del Estado, y el respeto recíproco entre los mismos".

En la misma línea, decidieron "avanzar" en la superación de la situación de desacato en que se encuentra el Parlamento, de mayoría opositora, declarado así por el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) luego de que la Cámara incorporase a tres diputados de la MUD cuya investidura ha sido impugnada ante el Supremo.

Por ello, anunciaron que se convocará a nuevas elecciones legislativas en el estado Amazonas, a fin de resolver la controversia.

También acordaron trabajar conjuntamente en la elección de dos nuevos rectores del Consejo Nacional Electoral (CNE, poder electoral), a quienes les caduca el mandato en diciembre.

Tras ello, el Gobierno celebró los resultados de la plenaria que, según Rodríguez, transcurrió en un clima de concordia y reflexión.

El representante del oficialismo consideró además que "es un buen momento" para que los opositores que critican el proceso del diálogo se sumen a la mesa de conversaciones pues, aseguró, "no queda nada en la violencia, sino tristeza, angustia y desolación".

La MUD, por su parte, tomó como una victoria los acuerdos alcanzados que incluyen, según dijeron, nuevas liberaciones de opositores encarcelados.

Aunque en el comunicado la MUD no precisa cuándo se concretarían estas liberaciones ni cuántas personas se verían beneficiadas con estas medidas, el jefe de la bancada mayoritaria del Parlamento, el opositor Julio Borges, indicó vía Twitter que las excarcelaciones se llevarían a cabo "en las próximas horas".

El bloque opositor reiteró que, a su juicio, el objetivo de la mesa de diálogo "es construir una salida electoral a la grave crisis política e institucional que atraviesa nuestro país" y consideró que los acuerdos alcanzados hasta ahora "van en esa dirección".

En razón de ello, anunciaron que se mantendrán en el proceso de diálogo que celebrará su tercera plenaria el próximo 6 de diciembre.

De esta forma la MUD desechó la posibilidad de abandonar las negociaciones como reclamaban algunos grupos opositores bajo el argumento de que no están dadas las condiciones para conversar con el Gobierno y de que este solo busca "ganar tiempo" y bajar las protestas.

Varios voceros del partido Voluntad Popular -que se ha negado a participar en las negociaciones- cuestionaron los acuerdos pues, insisten, la idea de dialogar es conseguir que se llame a unas elecciones nacionales para cambiar de jefe de Estado.

Entretanto, el presidente Maduro ha considerado los anuncios de hoy como "excelentes avances para la paz y la prosperidad" del país.

Con información de EFE