Estudiantes vuelven a protestar en varias ciudades de Chile
Cerca de 300.000 estudiantes estaban realizando una prueba de educación.
Nuevos incidentes impidieron que estudiantes de algunos colegios se presentaran a la segunda jornada de la Prueba de Selección Universitaria (PSU), el examen único de admisión a las universidades chilenas, que secundarios intentaron boicotear al estimar que profundiza la discriminación del sistema educativo.
Grupos de estudiantes volvieron a protestar en las afueras de varios colegios, evitando el ingreso de estudiantes inscritos para realizar el examen.
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Por la tarde la filtración de la prueba de ciencias sociales obligó a las autoridades a suspender ese examen.
"Debido a la filtración de la Prueba de Historia, Geografía y de Ciencias Sociales (...) se ha procedido a suspender la aplicación de la prueba", anunció el Consejo de Rectores de Universidades chilenas.
Con la prueba de Historia culminaba el proceso que arrancó el lunes y que incluyó también la toma de exámenes de matemáticas, lenguaje y ciencias.
"297 mil jóvenes debían rendir PSU, pero + de 80 mil no pudieron porque un grupo de violentistas les arrebató ese derecho", indicó el presidente chileno, Sebastián Piñera, al cierre de la jornada.
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El mandatario aseguró en Twitter que "los violentistas serán juzgados y sancionados por la Justicia y los estudiantes tendrán otra oportunidad de rendir la prueba e iniciar una nueva vida", en la educación superior.
La PSU estaba programada para noviembre del año pasado, pero fue pospuesta en dos ocasiones debido a las manifestaciones sociales que estallaron en Chile a fines de octubre y que dejaron 29 muertos.
Cerca de 300.000 estudiantes se inscribieron para realizar el examen, que se toma una vez al año, en 729 colegios y otras instituciones a lo largo de Chile.
La Asamblea Coordinadora de Estudiantes Secundarios (Aces) llamó a "boicotear" el proceso, al estimar que la PSU perpetúa los problemas de segregación de la educación.
La prueba estandarizada mide habilidades y el conocimiento acumulado en los últimos cuatro años de la secundaria y se consideran también las calificaciones escolares.
Durante años, quienes obtienen los mayores puntajes de la PSU provienen de colegios privados, donde estudia el 8 % de los estudiantes. Son ellos los que logran entrar mayoritariamente a las universidades más codiciadas.
La desigualdad en el acceso a la educación, la salud, las pensiones y otros beneficios sociales han estado en el centro del estallido social de los últimos meses.