Fuerzas iraquíes se aproximan al complejo gubernamental del oeste de Mosul
Las fuerzas iraquíes asaltaron el complejo gubernamental ubicado en la mitad oeste de la ciudad de Mosul y se disponen a arrebatarlo al grupo terrorista Estado Islámico.
El comandante de la Policía Federal, el mariscal Raid Shaker Yaudat, dijo que sus unidades se encuentran a decenas de metros del complejo gubernamental, también llamado "cuadrado de seguridad", ubicado en el barrio de Al Dauasa.
Yaudat aseguró que el control de esos edificios "va a determinar la batalla por la liberación (de Mosul) a nivel estratégico y moral", debido a su simbolismo y a su localización, en el centro de la mitad oeste.
La policía entró hoy en los barrios de Al Dauasa, Al Dendán y Al Nabi Sheit, donde mató a decenas de combatientes del EI y destruyó 14 vehículos bomba, y seis posiciones de francotiradores del grupo radical ubicadas en edificios públicos y en viviendas privadas.
Residentes de la zona relataron que helicópteros Apache supuestamente estadounidenses bombardearon intensamente el complejo gubernamental, contra el cual lanzaron decenas de misiles.
Un habitante de Bab Lakash, distrito próximo a las sedes públicas, de nombre Zaid al Hamadany, dijo en una conversación telefónica que los aparatos apoyan las tropas terrestres y que miembros del EI se encuentran aún dentro del complejo.
Por su parte, el comandante de las Fuerzas Antiterroristas, Abdelwahab al Saadi, señaló que sus hombres avanzaron en los barrios de Al Sumud, Al Mansur y Al Shuhadá, en el suroeste de Mosul.
En esa zona, abatieron a decenas de yihadistas y repelieron varios ataques suicidas lanzados por el EI con coches bomba.
Las fuerzas iraquíes se aproximaron además a la estación de ferrocarril desde el barrio de Uadi Hayar, donde se registraron intensos combates contra los yihadistas y contaron con el respaldo de la aviación gubernamental en las operaciones militares.
Al mismo tiempo, al oeste de Mosul, en la comarca de Tel Afar, las milicias lideradas por chiíes Multitud Popular consiguieron dominar la cordillera que lleva a la carretera de Aayadiya, cerca del pueblo de Al Janazir, según un comunicado del grupo.
Las milicias progubernamentales estrecharon el cerco en torno a Tel Afar, situada 60 kilómetros al oeste de Mosul y uno de los pocos reductos que aún controla el EI en la provincia de Nínive, de la que Mosul es capital.
Mientras continúan los combates, más de 57.000 personas se han visto desplazadas de la parte occidental de Mosul desde el comienzo de la ofensiva sobre la misma el pasado 19 de febrero, informó hoy el Ministerio iraquí de Migraciones.
El titular del Departamento, Yasem Mohamed al Yaf, detalló en un comunicado que han sido acogidos más de 57.000 desplazados, a los que se les ha ofrecido la ayuda básica y alimentos, y que el Gobierno puede dar refugio a hasta 100.000 en los campamentos levantados con esa finalidad.
Por su parte, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) informó que 45.714 personas han huido de los combates en el oeste de Mosul en los pasados nueve días. Los desplazados han salido de Mosul desde el pasado 25 de febrero, cuando las fuerzas iraquíes se adentraron en el casco urbano del oeste de Mosul.
Al mismo tiempo, el Consejo provincial de Nínive alertó de que el proceso de registro y traslado de los desplazados está siendo lento debido a que, primero, tienen que pasar los controles de seguridad y, segundo, los campamentos al sur de Mosul están llenos, por lo que tienen que ser llevados hasta Al Jazer, a unos 30 kilómetros al este de la ciudad.
Un miembro del Consejo, Hosamadín al Abar, dijo que hay escasez de recursos en los campos, sobre todo agua potable y tiendas de campaña para los refugiados, porque hay una gran cantidad de ellos.
Al Abar destacó que algunos días llegan hasta 5.000 personas a estos recintos, gestionados por las autoridades iraquíes, en colaboración con organismos internacionales y ONG locales.
El diputado provincial señaló que varias familias de la zona se han ofrecido a acoger a los desplazados en sus hogares.
La evacuación de los civiles del oeste de Mosul está siendo ralentizada y dificultada por la distancia que hay hasta los campamentos y la falta de un puente que conecte la orilla occidental del río Tigris con la oriental, que fue recuperada por las fuerzas iraquíes a finales de enero.
Con información de EFE