Futbolista venezolano fue deportado de EE.UU. al Salvador por tener un tatuaje inspirado en el Real Madrid
El ciudadano venezolano Jerce Reyes Barrios estaba buscando asilo en Estados Unidos, pero cayó en la masiva deportación hacia la cárcel del Salvador.

Un grupo de 238 venezolanos fueron deportados esta semana desde Estados Unidos hacia El Salvador para ser recluidos en la cárcel de máxima seguridad de Nayib Bukele. La administración del presidente Donald Trump atribuyó la medida, que no tuvo autorización de la justicia, a la supuesta pertenencia de los expulsados a la banda transnacional Tren de Aragua.
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Sin embargo, con el paso de los días se ha venido confirmando que muchos de los deportados no tenían historial criminal y mucho menos pertenecían a ese grupo criminal, pero habrían sido detenidos por su situación ilegal en Estados Unidos. Pero todavía más descabelladas fueron las razones por las que algunos habrían sido enviados precisamente al país latinoamericano. Una de ellas sería tener tatuajes en su cuerpo, aunque ni siquiera tuvieran que ver con los que distinguen a pandilleros como los pertenecientes a la Mara Salvatrucha, como los que Bukele encierra en su prisión.
Es el caso de Jerce Reyes, cuyo abogado contó a la cadena ABC que su cliente era futbolista y se encontraba en Estados Unidos buscando asilo político después de haber sido detenido y torturado por fuerzas del régimen de Nicolás Maduro en una protesta en marzo del 2024. Incluso señaló que Reyes había cruzado legalmente por la frontera con México en septiembre, y tenía cita para revisar su situación en abril próximo.
Sin embargo, el presidente Trump revocó el permiso con el que él y cientos de miles de inmigrantes venezolanos permanecían en ese país, por lo que quedó desamparado en cuanto a su situación migratoria.
En contexto: Trump revoca la protección especial para venezolanos, afectando a unos 600.000 inmigrantes.
Paradójicamente, cuando las autoridades lo detuvieron la principal razón para enviarlo al país centroamericano no fue su estatus migratorio irregular, sino uno de sus tatuajes. El apoderado detalló que así figura en el expediente del departamento de seguridad interna que lo procesó: “Jerce Reyes Barrios no solo estaba ilegalmente en Estados Unidos, sino que tenía tatuajes que eran consistentes con aquellos que lo identificaban como miembro de la banda Tren de Aragua".
El documento incluso hace referencia a fotos suyas en redes sociales en las que, de acuerdo con las autoridades estadounidenses, lucía esos tatuajes. No obstante, el abogado señala que los tatuajes a los que hacen referencia en realidad eran inspirados en el club español Real Madrid, con una corona sobre una pelota de fútbol y la palabra "Dios".
La defensa intentó demostrar que el futbolista no tenía anotaciones criminales en Estados Unidos y tampoco en Venezuela, pero de poco sirvió para evitar que lo deportaran hacia El Salvador. Luego, su familia lo identificó en las imágenes de los deportados siendo reducidos y conducidos bruscamente por los guardias de ese centro penitenciario.
Su caso se suma a los de decenas de personas que han sido deportadas o expulsadas arbitrariamente de Estados Unidos. En muchos casos, ni siquiera han tenido el derecho a un abogado o a que se contemple alguna alternativa a su situación. En los más absurdos, han caído por un tatuaje o incluso por comentarios vertidos en redes sociales contra la administración Trump.
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En sus redes sociales se puede ver que Reyes Barrios efectivamente era futbolista, se desempeñaba como arquero y estuvo viviendo en Bogotá.