Muerte a tiros de un perro en Nueva Zelanda desata aguda polémica
El can fue abatido tras haber ingresado a la pista de despegue y retrasar 16 vuelos.
La Policía de Nueva Zelanda abatió a tiros un perro de seguridad del aeropuerto de Auckland que había escapado hacia la pista de despegue, provocado retrasos en varios vuelos, informó la prensa local.
El perro, un pastor escocés de 10 meses llamado Grizz y que estaba siendo entrenado en la detección de explosivos, salió corriendo hacia la pista donde estuvo unas tres horas pese a los intentos del personal de seguridad del aeropuerto para recuperarlo.
La compañía encargada de la seguridad, Avsec, indicó que Grizz "se asustó" cuando intentaban subirlo de madrugada a un vehículo y que cuando lo encontraron en la pista no dejaba que nadie se le acercara, según la televisión TV3.
Avsec dijo que "lo intentaron todo" para recuperarlo, incluido comida, juguetes y otros perros.
La dirección del aeropuerto optó por ordenar a la Policía que abatiera al perro después de que su huida hubiera causado retrasos en dieciséis vuelos nacionales e internacionales.
Los perros de seguridad de Avsec están especializados en la detección de explosivos y su entrenamiento puede costar hasta unos 70.000 dólares.
Con información de EFE