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"Ocho de cada diez venezolanos ven en el revocatorio solución a la crisis"

Juan Carlos Caldera, enlace de la Mesa de la Unidad Democrática con el Consejo Nacional Electoral, habló con LA F.m. de los escenarios que se vienen para su país.

Publicado:
Actualizado:
Martes, Agosto 2, 2016 - 07:14

Las explicaciones en LA F.m. de Juan Carlos Caldera


 




 


La oposición venezolana logró el aval del poder electoral para avanzar hacia un referendo revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro, aunque aún le queda un largo trecho para lograr que la consulta no sólo se concrete, sino que también sea este año.


 


"Cumplieron con el requisito del 1% (del padrón electoral) de validación de manifestaciones de voluntad", anunció la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, al informar que la oposición consiguió las 200.000 firmas para pedir la activación de la consulta.


 


La coalición Mesa de la Unidad Democrática (MUD) tendrá ahora dos días para hacer la solicitud. El CNE debe responder en un máximo de 15 días continuos y luego fijar en 15 días hábiles la fecha y centros de recolección de cuatro millones de firmas, necesarias para convocar a la consulta. "Es muy probable que la convocatoria sea en la primera semana de septiembre. Eso quiere decir que tendremos referendo revocatorio antes de la última semana de diciembre de 2016", manifestó el portavoz de la MUD, Jesús Torrealba.


 


Para ir a la siguiente etapa, la MUD exigía desde la semana pasada el pronunciamiento del CNE, al que acusa de aliado del gobierno y de retrasar todo para evitar que la consulta se haga antes del 10 de enero de 2017Ese límite es clave. Si el referendo se realiza este año y Maduro pierde, habrá elecciones; pero si es revocado después de esa fecha, los dos años de mandato que faltarían los completará su vicepresidente.


 


"¡El referendo está muerto!"


 


Para revocar a Maduro se necesitan más de los 7,5 millones de votos con los que fue elegido en 2013. Según la firma Venebarómetro, 64% (unos 12 millones) de los electores votaría por sacarlo del poder. El malestar aumentó en los últimos meses pues la escasez de alimentos y medicinas alcanza el 80%, y no hay bolsillo que siga el ritmo de una inflación que fue de 180,9% en 2015 y el FMI proyecta en 720% para 2016.


 


El gobierno, que atribuye la crisis al desplome de los precios del petróleo y a una "guerra económica" de empresarios, asegura que no habrá referendo este año. "Haremos lo que tengamos que hacer, dentro de la Constitución y la ley, para que no haya revocatorio en el 2016, ni en el 2017, ni en el 2018", dijo el número dos del chavismo, Diosdado Cabello.


 


La última jugada del oficialismo fue una petición al CNE, la semana pasada, para que inhabilite a la MUD como actor político, acusándola de fraude en la recolección de las 200.000 firmas. El propio Maduro demandó por fraude a la MUD ante el Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) -al que la oposición también acusa de servir al chavismo-, lo que se sumó a 8.600 recursos legales interpuestos por el oficialismo.


 


"El referendo revocatorio está muerto legalmente, porque nada puede edificarse sobre una base profundamente fraudulenta", aseguró Jorge Rodríguez, representante de Maduro en el proceso, tras entregar al CNE una carta que reseña las acusaciones. Pero Torrealba le respondió: "lo que está 'muerto' es el régimen que tú representas, muerto en el favor popular".


 


Por su parte, Lucena anunció que se detectaron casos de "usurpación de identidad" y otras anomalías que pedirá investigar a la Fiscalía. Para el analista Benigno Alarcón, el referendo es una "válvula de escape" y si no se realiza "la presión va a salir" como estallido social.


 


Un campo minado


 


Para el constitucionalista José Ignacio Hernández, la petición de ilegalidad contra la MUD es "improcedente", pero podría retrasar el referendo, ya con el tiempo muy ajustado. El ambiente se enturbió aún más el pasado jueves, cuando el Parlamento -de mayoría opositora- reincorporó a tres de sus diputados que el TSJ ordenó separar en enero mientras resolvía una acusación de fraude electoral presentada por el chavismo.


 


Seis meses después no se ha resuelto el caso, por lo que la MUD los juramentó. Ante ello, el TSJ declaró este lunes en desacato a la mayoría opositora parlamentaria. Maduro acusó a la oposición de dar "un golpe parlamentario contra el poder judicial", pero no se refirió al anuncio del CNE. Estados Unidos, al que Caracas acusa de injerencia, terció este lunes. El secretario de Estado, John Kerry, llamó a las autoridades a "no jugar a retrasos que vayan en ventaja de una parte frente a la otra". Ante la profundización de la crisis, una comisión de expresidentes extranjeros impulsa un diálogo entre gobierno y oposición.


 


Ocho de cada diez venezolanos apoyan un diálogo, según una encuesta de Hinterlaces. Pero el referendo es el principal obstáculo para la negociación.

Fuente:
Sistema Integrado Digital