Polonia pedirá en extradición a criminal nazi homenajeado en Parlamento canadiense
El homenajeado en Canadá era un miembro de la "formación criminal nazi".
El ministro polaco de Educación, Przemyslaw Czarnek, anunció este martes que su Gobierno solicitará a Canadá la extradición de un combatiente nazi de origen ucraniano que fue homenajeado en el parlamento durante la reciente visita del presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski.
En un comunicado oficial publicado hoy, el ministro polaco escribió que "en vista de los escandalosos acontecimientos ocurridos en el Parlamento canadiense", ha adoptado medidas para solicitar "la posible extradición de este hombre a Polonia".
Czarnek recordó que el veterano de la Segunda Guerra Mundial era un miembro de la "formación criminal nazi" SS Galizien y expresó su rechazo a la "falsificación de la historia".
Junto a la carta dirigida al Gobierno de Justin Trudeau, Czarnek incluyó un documento del Instituto de Memoria Nacional polaco que detalla "crímenes cuyas características constituyen la base para solicitar la extradición" de Yaroslav Hunka.
Se trata de una reacción al acto que tuvo lugar el pasado viernes en el Parlamento de Canadá, donde se homenajeó a Hunka, de nacionalidad canadiense y origen ucraniano, que luchó en una unidad de la Wafen-SS de la Segunda Guerra Mundial.
Hunka, de 98 años, fue presentado ante Zelenski como "un canadiense ucraniano, veterano de la Segunda Guerra Mundial, que luchó por la independencia de Ucrania contra los rusos y sigue apoyando a las tropas incluso a sus 98 años de edad".
Hace pocos días, el embajador polaco en Canadá, Witold Dzielski, protestó contra el homenaje y explicó que la unidad en la que combatió Hunka participó en el exterminio de civiles de etnia polaca en la región de Lublin en 1944.
Además, el viceministro polaco de Exteriores, Arkadiusz Mularczyk, comentó hoy a la prensa en Varsovia que el presidente del Parlamento de Canadá debería dimitir ante lo que supone "una gran falta de tacto, una falta de conocimiento de la historia y también una falta de diligencia".
El presidente de la filial canadiense de la prestigiosa organización filantrópica judía B'nai B'rith, Michael Mostyn, hizo ayer pública una carta en la que exigió "una disculpa por este escándalo que incluya una explicación detallada de cómo pudo haber ocurrido tal cosa en el corazón de nuestra democracia".
Por su parte, la Oficina del Primer Ministro de Canadá negó que Justin Trudeau tuviese conocimiento previo del pasado nazi de Yaroslav Hunka.