Capturado presunto homicida y violador de niña de 11 años en Santander
La menor había sido raptada en el municipio de Curití.
La captura del presunto homicida y violador de la menor de 11 años, que había sido raptada en el municipio de Curití en Santander, se efectuó en la vereda Irapire en donde fue hallado el cuerpo sin vida de la víctima.
Por su presunta participación en el atroz asesinato de la pequeña Luz Dary Guarguatí, quien sufría retardo psicomotor, el señalado será presentado ante un juez con función de control de garantías de Barichara para responder por los delitos de homicidio agravado, acceso carnal violento agravado, ocultamiento, alteración y destrucción de material probatorio.
El coronel Jaime Escobar, comandante de la Policía de Santander, aseguró que el capturado deberá responder penalmente por las atrocidades que cometió contra la menor.
"Evidenciamos que el cuerpo de la menor fue abusado, sin embargo debemos esperar los resultados de los exámenes que hará Medicina Legal. Será presentado y puesto a disposición para que responda dentro del debido proceso por todos los hechos y atrocidades cometidas contra esta bella niña", aseguró el oficial de la Policía de Santander.
Agregó que el sujeto de 29 años, oriundo de Bucaramanga, residía en el sector rural del municipio en donde laboraba desde hacía varios meses y en donde era conocido por los vecinos de la vereda Irapire en Curití.
"Algunas personas lo describen como alguien callado, alguien que no tenía interacción con mucha gente. También aseguran que es una persona que se desempeñaba en labores varias y pudimos evidenciar que es un hombre con un bajo nivel de escolaridad y viendo algunas imágenes nos da a entender que presenta algunos problemas", puntualizó el comandante de la Policía de Santander, el coronel Jaime Escobar.
El presunto responsable fue conducido al hospital municipal de Curití, hasta donde llegaron los habitantes de la localidad a exigirle a las autoridades que revelaran su identidad.
Ante la indignación de la comunidad, algunas personas atentaron contra la infraestructura del centro asistencial pidiendo que el posible agresor saliera a dar la cara, situación que empeoró y terminó con disturbios entre los residentes y los uniformados de la Policía Nacional.