Un área similar a España se ha deforestado en la Amazonía en 19 años
Entre los años 2000 y 2018 la deforestación acumulada alcanzó 511.787 km2 en los países que conforman la Amazonía.
Según un reporte divulgado por la ONG ambiental WWF, entre los años 2000 y 2018 la deforestación en la región Amazónica alcanzó 511.787 kilómetros cuadrados, un área similar al territorio continental de España.
El reporte hecho por la Red Amazónica de Información Socioambiental Georreferenciada (Raisg) presentó la versión digital del "Atlas Amazonía Bajo Presión 2020", que recoge de manera interactiva los resultados de la investigación sobre las transformaciones que ha presentado la Amazonía en un período de 19 años.
En este proyecto, queda en evidencia como los trabajos de desarrollo como la construcción de "vías, hidroeléctricas, hidrocarburos, minería, actividades agropecuarias y economías ilegales son responsables de la rápida transformación que experimenta la región".
Puede leer: Campesinos en Catatumbo piden estudios científicos antes de fumigación con glifosato
Añade el reporte que "considerando que una carretera puede impactar entre 5 y 50 kilómetros a ambos lados de su trazo, tenemos que la infraestructura vial ha alterado 4,6 millones de km2 de la Amazonía, equivalente al 55% de su superficie total, con graves impactos para la biodiversidad y para los medios de vida de comunidades y habitantes de la Amazonía".
Construcción de hidroeléctricas y minería
El reporte señala que "para marzo de 2020 ya existían o estaban planificadas 883 hidroeléctricas. En Territorios Indígenas, los proyectos en planeación aumentaron un 60% en ocho años (2012–2020) y en Áreas Naturales Protegidas, las hidroeléctricas en operación o construcción incrementaron un 77% para el mismo período".
Según distingue el Atlas, "las presiones hacen referencia a todas las actividades que están en curso o en proceso de instalación y cuyos impactos pueden ser medidos; en tanto que las amenazas son proyectos e inversiones planificadas cuyas características permiten calcular sus impactos a futuro".
En ese sentido, expone que "la minería es una de las actividades con mayor crecimiento: pasó de concentrar 52.974 zonas mineras en el 2012 a 58.432 en el 2020, lo que representa un incremento de 10%. Esta actividad afecta al 17% de la región y se realiza en todos los países que conforman el bioma".
Sin embargo, se concentra sobre todo en cuatro países; el 96% de la minería se desarrolla en Brasil, Venezuela, Guyana y Perú, siendo Brasil el país que concentra más áreas de interés para esta actividad extractiva (75%) en la región.
Más en: Fronteras terrestres y fluviales con Venezuela seguirán cerradas
Reseña el estudio también que "el impacto de megaproyectos de infraestructura e industrias extractivas en la Amazonía es devastador. Si bien algunas de estas actividades son consideradas motores de desarrollo en la región amazónica, es necesario plantear un modelo distinto que promueva la conservación y uso sostenible de los bosques y la biodiversidad, y que salvaguarde los pueblos indígenas y sus derechos".
El informe realizado por diez grupos técnicos (más de 30 especialistas) que generaron 23 mapas para mostrar la situación de toda la región, además de decenas de gráficos y tablas informativas, habla también que la pérdida de bosque es uno de los desafíos más grandes que enfrenta la Amazonía.
"Sus causas, que varían en importancia y tipo para cada país, están asociadas a actividades extractivas, agropecuarias y obras de infraestructura. Entre 2000 y 2018, el 87,5% de la deforestación ocurrió fuera de los Territorios Indígenas y las Áreas Naturales Protegidas de la Amazonía, y solo el 12,5% de la deforestación ocurrió dentro de ellos. En este período, Brasil determinó la tendencia, con 425.051 km2", indicó.