"Estamos cansados del trato en las entradas de la Fiscalía": Colegio de Abogados Penalistas

El presidente del Colegio de Abogados Penalistas de Colombia Francisco Bernate, denunció que es denigrante el trato que reciben los abogados que acuden a cualquier tipo de diligencia en las instalaciones de la Fiscalía General de la Nación, donde en la entrada los despojan de cualquier elemento electrónico sin ninguna justificación. 

Lea además: Fuera del partido Conservador, Mauricio Cárdenas sigue con aspiraciones presidenciales

Explicó además que incluso les quitan los relojes y hasta las llaves del carro imposibilitando que puedan ejercer su labor de juristas. 

"Los abogados penalistas de Colombia estamos cansados del trato que se nos dispensa en las entradas de la Fiscalía General de la Nación, cuando viene un criminal a rendir su versión puede entrar sus equipos celulares, sus computadores lo propio pasa con algunos ciudadanos y con los periodistas y nosotros los abogados penalistas nos vemos sometidos a un trato indignante", manifestó. 

Agregó que, "nos toca hacer una fila donde tenemos que entregar todos los aparatos electrónicos entre otros teléfonos celulares, tabletas y hasta las llaves del carro y el reloj personal si es electrónico". 

Bernate señaló que este requerimiento constituye una vulneración a su labor, pues ahora los procesos y expedientes se guardan en elementos electrónicos. 

"Nadie carga hoy en día una agenda deshojada y vieja en la axila para ver cuáles son las fechas de las diligencias, nadie carga las carpetas en las manos todo eso está en los computadores", explicó. 

Vea además: Muerte de Alfonso Cano: Gobierno le responde a Victoria Sandino

También dijo que esa restricción de la comunicación,  afecta incluso sus vínculos familiares, "podemos pasar ocho días dentro de una Fiscalía sin tener el derecho a comunicarnos con nuestras familias, es por ello que hemos enviado una comunicación al señor Fiscal General de la Nación para que por favor se sirva a levantar la restricción para que los abogados que somos tratados en este caso como ciudadanos de segunda y que están bajo sospecha, podamos utilizar nuestras herramientas de trabajo".