Santiago Jaramillo, polémico concejal de Medellín, regresa a la corporación
La Procuraduría General de la Nación lo había suspendido por seis meses.
Santiago Jaramillo, concejal de Medellín, regresará nuevamente a la corporación y ocupará su curul, tras haber cumplido los seis meses de sanción que le impuso la Procuraduría, por golpear en el rostro a un periodista de Telemedellín en pleno recinto.
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El polémico dirigente político, quien fue expulsado del Centro Democrático por el incidente, se mostró satisfecho por retornar a su cargo. Reiteró que su prioridad es continuar con su precandidatura a la Alcaldía de Medellín, por el movimiento “Consenso, con sentido social”. Jaramillo debe lograr 80 mil firmas, aunque aspira a superar las 200 mil.
"Regreso al cabildo de los medellinenses el día miércoles 3 de octubre, con el ánimo de construir el movimiento ciudadano 'Consenso, con sentido social'. Saldremos a recoger las firmas que sean necesarias que me permitan ese aval. Ya no pertenezco al Centro Democrático. Fui expulsado por hacer democracia", dijo.
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Jaramillo Botero recuperará sus derechos de cabildante, como voz y voto en los debates de los proyectos de Acuerdo. Sin embargo, perderá los beneficios de bancadas, al ser expulsado de su partido.
Esta no ha sido la única polémica que ha protagonizado Santiago Jaramillo. El año pasado, tuvo una acalorada discusión con su compañero Bernardo Alejandro Guerra. En un tono burlesco, se refirió al estricto esquema de seguridad del concejal, quien una vez fue atacado con arma blanca por parte de un familiar.
Sanción Procuraduría
La Procuraduría calificó la falta de Santiago Jaramillo Botero como grave a título de dolo, porque incumplió el deber consagrado en el artículo 34, numeral 6, de la Ley 734 de 2002, que indica: “todo servidor público debe tratar con respeto, imparcialidad y rectitud a las personas con que tenga relación por razón del servicio”.
El ente de control advirtió que “la investidura de concejal de Medellín, le impone un comportamiento ejemplar, no solo frente a los demás miembros de la corporación, sino de los empleados adscritos a la misma y, sobre todo, de la comunidad”.