¿Por qué ante la mala calidad del aire es bueno usar tapabocas?
La mala calidad del aire cobra al año la vida de millones de personas en el mundo.
En medio de la covid-19, la humanidad aprendió a usar el tapabocas de manera permanente. Se volvió casi que una prenda más de vestir, como parte de esa necesidad de tomar medidas preventivas para combatir el coronavirus.
Ahora bien, pese a que su uso fue obligatorio por cierto tiempo para contener la propagación de la covid-19, hay otra serie de beneficios alrededor de este accesorio.
Y es que la contaminación atmosférica se ha sumado a las dificultades ya generadas por el coronavirus. Por eso, hay médicos que piden reforzar el uso del tapabocas.
Uso del tapabocas y la mala calidad del aire
De acuerdo a varios estudios, nueve de cada diez personas respiran a diario aire contaminado. Según las estimaciones de la Organización Mundial de la Salud, más de siete millones de personas mueren de manera prematura al año por enfermedades relacionadas con la mala calidad del aire.
Los habitantes de las principales ciudades son las que más sufren sus efectos, toda vez que se aumenta el riesgo de padecer enfermedades respiratorias, cáncer de pulmón o patologías cardiovasculares.
Por eso, las autoridades de salud hacen periódicamente llamados con toda serie de recomendaciones para prevenir enfermedades respiratorias y que puedan saturarse aún más las redes hospitalarias.
La clave entonces es revisar cuando las estaciones de monitoreo de calidad del aire están en amarillo, naranja o rojo para tener en cuenta los efectos negativos y empezar a usar el tapabocas.
Población vulnerable a mala calidad del aire
- Menores de 5 años
- Adultos mayores de 65 años
- Mujeres en embarazo
- Población con enfermedades cardíacas o pulmonares