¿Qué es la mamografía y para qué sirve hacerse este examen?

Los seres humanos están expuestos a sufrir diferentes enfermedades que pueden afectar notoriamente nuestra salud, por lo que es conveniente hacerse diferentes exámenes médicos que ayuden a prevenir ese tipo de riesgos. Uno de ellos es la mamografía. 

Este examen consiste en una imagen del seno tomada a través de rayos X, mediante la radiografía los médicos podrán diagnosticar si existen signos de cáncer de mama en sus etapas iniciales. La mamografía puede ser de dos tipos:

Mamografía de detección 

Esta se hace cuando se detectan signos de cáncer de mama. Su principal ventaja es que permite detectar esta patología en su etapa temprana, con lo que se podrá iniciar con el tratamiento antes de que esta se propague.

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No obstante, este tipo de mamografías tiene sus riesgos, ya que se necesitarán más pruebas para determinar si existe la presencia de algún agente cancerígeno, lo que puede provocar ansiedad; sin mencionar que la paciente tendría que exponerse a la radiación por la continua toma de pruebas.

Mamografía de diagnóstico 

Aplica cuando se detecte alguno de los síntomas asociados al cáncer de seno; tales como dolor en los senos, cambio en su forma o tamaño, engrosamiento de la piel de las mamas o secreción en el pezón. Esta mamografía ayudará a evaluar si la paciente sufre la patología. 

Usualmente, este proceso suele ser molesto e incluso doloroso; ya que la mujer debe poner su busto en una máquina de rayos X donde dos placas de plástico presionarán firmemente el pecho para tomar la radiografía correspondiente. Sin embargo, el proceso dura unos cuantos minutos para tener dos imágenes de los senos; una es frontal y la otra es de costado.

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Las mamografías arrojan dos posibles resultados: normal y anormal. El primero ocurre cuando no se detecta la presencia de algún signo asociado al cáncer de signo, aunque se deben seguir las recomendaciones que brinde el profesional si es el caso. 

Si el segundo es anormal no siempre es señal de que la mujer tenga cáncer de seno. En este caso, se realizarán otro tipo de pruebas y exámenes para confirmar si existe la enfermedad. También es posible que se tenga que recurrir a un especialista en mamas o un cirujano para corroborar o descartar el cáncer.