¿Qué tecnologías usarían las universidades para protegerse del Covid-19?
¿Cómo proteger a las universidades del COVID-19 a través de la tecnología?
Después de poco más de dos meses de clases virtuales, talleres en online y una serie de medidas para reducir el impacto del coronavirus en el proceso educativo de los estudiantes, las universidades ahora deben prepararse para un gradual retorno a clases presenciales.
Según datos del Sistema Nacional de Información de la Educación Superior (SNIES), a partir del 1 de agosto, cerca de 269 centros educativos estarían habilitados en Colombia para abrir sus puertas de manera gradual en todo el territorio nacional.
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Pero aún no se ha establecimiento qué recursos tecnológicos podrían usar las instituciones de educación superior para garantizar la implementación y cumplimiento de los protocolos de bioseguridad que el Gobierno Nacional solicita, para contener la propagación del Covid-19.
Para tal fin, las universidades se han apoyado en la incorporación de tecnologías que le permitan tener un control de sus espacios y del aforo de publico en sus áreas. Ejemplo de ello es el Protocolo Seguro de Apertura (PSA), el cual que brinda la posibilidad de saber en tiempo real cuántos estudiantes ingresan a sus instalaciones y hasta cuál es su estado de salud.
¿Cómo funciona esta tecnología?
De acuerdo con Andrés Gómez, CEO y cofundador de DataWifi, luego de que los estudiantes, profesores o trabajadores de la institución hayan generado un usuario en la ‘app’ o plataforma, ellos podrán a través de un código QR registrar su ingreso en cada uno de los lugares que hacen parte del plantel educativo.
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Además, tendrán la posibilidad de reportar su estado de salud, informar en vivo una situación de emergencia, entregar sus opiniones sobre los protocolos o actualizarse de las decisiones tomadas por la universidad en esa dirección.
Mediante este recurso, es posible tener un control preciso del flujo de las personas que circulan por el área de una universidad, lo cual permite tener una trazabilidad de cada persona y en dado caso poder realizar un cerco epidemiológico preciso en caso de que se presenten posibles casos de contagio en el interior de una comunidad académica.