Galán pidió acciones al Inpec para controlar extorsiones desde las cárceles

El alcalde de Bogotá, Carlos Fernando Galán, ha pedido al Instituto Nacional Penitenciario y al Gobierno Nacional (INPEC) reforzar el control sobre los reclusos involucrados en actividades criminales desde las cárceles, tras la reciente desarticulación de una banda delictiva dirigida por alias 'Satanás'.

Galán expresó su preocupación luego de descubrir que alias 'Satanás', al parecer, coordinaba extorsiones y otras actividades delictivas desde su celda, utilizando teléfonos celulares.

"Pedimos al INPEC y al Ministerio de Justicia que garantice que, estos delincuentes, cuando son capturados por parte de la Policía, terminen realmente aislados porque sabemos que la extorsión es un delito que particularmente se manifiesta y se mantiene muchas veces. Se origina desde los propios centros penitenciarios", dijo.

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"Si no logramos ese aislamiento efectivo de quienes son capturados por este delito, vamos a tener una cadena delincuencial que se mantiene. Así que nosotros, como lo hicimos hace unos meses, ratificamos la petición al Gobierno Nacional y al INPEC para que realmente estén aislados estos delincuentes", sostuvo.

La petición del Alcalde surge después de que el GAULA Bogotá, en colaboración con la Fiscalía General de la Nación, llevara a cabo una operación exitosa que resultó en la captura de nueve presuntos miembros de la banda 'Satanás'. Esta organización criminal estaba implicada en extorsiones en varias localidades de la capital, según informaron las autoridades.

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Durante los tres meses de investigación, se realizaron nueve diligencias de allanamiento y registro en áreas como Kennedy, Bosa, Ciudad Bolívar y San Cristóbal. Las acciones condujeron a cinco capturas en flagrancia y a la ejecución de cuatro órdenes judiciales por delitos que incluyen concierto para delinquir agravado, extorsión agravada y posesión ilegal de armas de fuego.

Entre los elementos incautados durante los operativos se encuentran 12 celulares utilizados para coordinar extorsiones, dos artefactos explosivos caseros, cinco panfletos intimidatorios relacionados con la extorsión, así como drogas y material explosivo. Además, el grupo criminal enfrenta acusaciones por ocho intentos de homicidio.