Los árboles talados estaban enfermos, dice el Distrito

La Secretaría de Ambiente, el Instituto Distrital de Recreación y Deporte (IDRD) y el Jardín Botánico respondieron a las críticas que han caído sobre la administración por la tala de árboles en diferentes sectores de Bogotá.   

Una de esas críticas ha sido la de la concejal María Fernanda Rojas, quien denunció este lunes que en la actual administración se han autorizado 34.000 talas de árboles. Además, asegurí que cada árbol que quita el Distrito cuesta aproximadamente 501.341 pesos.   

Sumado a esto, ha habido varias manifestaciones por parte de los ciudadanos ante la tala en diferentes zonas verdes, como es el caso del parque Japón en la localidad de Chapinero, donde el Esmad acompañó a los funcionarios que talaron los árboles. Supuestamente, fueron removidos para poder hacer canchas sintéticas y un gimnasio al aire libre.  

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Frente a estas inconformidades por parte de la ciudadanía vecina a estos sitios, el secretario de ambiente, Francisco Cruz, aseguró que en los tres años de esta administración se han plantado 218.000 árboles en toda la ciudad. Además, señaló que la tala de árboles no se realiza sin los respectivos conceptos técnicos requeridos por las autoridades ambientales, y añadió que generalmente estos árboles representan un riesgo para la ciudadanía.  

Laura Mantilla, directora del Jardín Botánico, afirmó: “Los árboles que esta institución está talando son enfermos, malformados, con crecimiento deficiente, por exposición de raíces y las especies que más sufren volcamiento en Bogotá, como eucaliptos, acacias y cipreses”. 

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Respecto a la situación del parque Japón, Cruz afirmó: “Si se tala un árbol, tiene que compensarse, y hoy en Bogotá por cada árbol que se ha talado ocho se han sembrado”. 

Además, Orlando Molano, director del IDRD señaló: “Hemos tomado registros fotográficos del parque Japón desde hace varios meses y vemos que no lo están disfrutando ni los niños ni los jóvenes. Algunos vecinos no están de acuerdo, pero hay muchos que sí lo están. Nuestra obligación como Estado es intervenir los parques de Bogotá”.