Peligro latente en las calles de Bogotá: mal estado de vías y sin demarcación
Vías como la Autopista Norte, la Carrera Séptima, la NQS y otras, no cuentan ni siquiera con la demarcación básica ¡Eso sí, con huecos!
El mal estado de las vías de Bogotá sí que se ha convertido en un dolor de cabeza latente para los conductores que se enfrentan a diario a ello, convirtiéndose en unos expertos para esquivar huecos y además aprendérselos para evitar caer en estos después, pues tristemente ya se normalizó ver las calles así, con los llamados “cráter” que se vuelven un arma mortal.
Según las cifras de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, en el año 2020 más de 350 personas murieron en accidentes de tránsito en Bogotá. Cifra de por sí alarmante teniendo en cuenta que fue el año del inicio de la pandemia, donde la ciudad estuvo confinada y los vehículos parqueados. Las mayores víctimas mortales son los motociclistas (132 muertos), seguido por los peatones (88) y ciclistas (62).
La siniestralidad se asemeja en muchas ocasiones a un coctel peligroso entre la imprudencia y la intolerancia de los actores viales, lo que es innegable, pero también se presentan choques simples o de gravedad en las vías, que no son atribuidas a esto, sino más bien a los problemas de infraestructura vial como huecos, losas con espacios entres los carriles en los que pueden caer los motociclistas, una especie de relieves en las calles luego del reparcheo de huecos, entre otros ¿Quién le debe responder a los bogotanos?
No hay demarcación de vías en Bogotá, pese a que la ley lo exige
Quizás muchos bogotanos ya ni se fijan en esto, pero la falta de demarcación de las vías - algo tan básico que no se cumple – puede conllevar a accidentes viales, pues esta señalización precisamente advierte a los conductores si puede o no adelantar, le demarca el carril para que no invada el otro y termine chocando con otro vehículo, le alerta si esa vía es de doble sentido o de uno solo, entre otros. De ahí su importancia.
La FM recorrió algunas vías principales de Bogotá y pudo constatar que la Autopista Norte desde la calle 170 hasta la 94, la Avenida NQS en varios tramos (uno de ellos en el sector de Ricaurte y la Calle 26) y la Carrera Séptima hacia el norte, especialmente después de la calle 142, no cuentan con la demarcación. Y, en otros puntos, ya las líneas están a punto de borrarse.
Mal estado de la Autopista Norte
Un experto en seguridad vial confirmó a La FM que es obligación del Estado garantizar los principios del Código Nacional de Tránsito. En la ley 769 de 2002, se señala que el Ministerio de Transporte debe elaborar un plan nacional de seguridad vial para disminuir la accidentalidad en el país, entre los artículos hay uno que habla específicamente de la demarcación y señalización vial.
“Artículo 5o. Demarcación y señalización vial: El Ministerio de Transporte reglamentará en un término no mayor de 60 días posteriores a la sanción de esta ley, las características técnicas de la demarcación y señalización de toda la infraestructura vial y su aplicación y cumplimiento será responsabilidad de cada uno de los organismos de tránsito en su respectiva jurisdicción (…) PARÁGRAFO 2o. La información vial y la señalización urbana, deberá hacerse con material antivandálico, vitrificado, que garantice una vida útil mínima de 10 años y, cuando así se aconseje, material retrorreflectante”, señala la norma.
Esto lo ratificó el propio director de la Agencia Nacional de Seguridad Vial, Luis Felipe Lota, quien en entrevista con La FM señaló la importancia de tener una buena infraestructura vial para lograr reducir las cifras de accidentalidad.
“Sin lugar a dudas el tener una infraestructura segura hace parte del sistema seguro, claramente tener mejores condiciones de infraestructura nos van a hace evitar siniestros viales, sobre todo mortales. El dueño de la infraestructura tiene que garantizar un mantenimiento óptimo de la misma para que podamos reducir problemas de siniestralidad, del estado de la vía, del diseño mismo de las vías y la señalización. Son tareas que deben ser desarrolladas por los dueños de la infraestructura”, aseguró.
Un claro ejemplo de los peligros de que no haya demarcación, es un tramo de la Autopista Norte a la altura de la estación Alcalá de Transmilenio, antes del puente de la Calle 134, sentido Norte – Sur. En este se puede observar cómo, en un punto donde hay una leve curva, los vehículos que van por el carril derecho terminan invadiendo el central al no tener demarcado el carril y guiarse por las losas de la vía que lo llevan hacia el centro.
Se escuchan pitos y hasta madrazos de conductores a otros, cuando realmente este es un problema de la falta de señalización que puede llevar a un accidente, que se sale de las manos de quien va conduciendo así cumpla con los límites de velocidad exigidos.
La falta de demarcación en las vías de Bogotá son un peligro. Pueden conllevar a un choque o otro tipo de accidente de mayor gravedad #AutopistaNorte #Calle136 #EstaciónAlcalá pic.twitter.com/XJLJS888ay
— Maleja Torres (@Kamitorrs) February 11, 2022
En otro caso, son los reparcheos de las vías que además de quedar con relieve y no al nivel del resto de la calle, ya tienen hasta huecos incluidos que terminan cogiendo los conductores y los obliga a reducir la velocidad a lo más mínimo, con riesgo a ocasionar choques con el carro que venga detrás y no se percate de que el otro frenó, o en el caso de motos hasta hacerlo caer y posiblemente ser atropellado.
¿Quién debe responderles a los bogotanos por el mal estado de las vías y los huecos?
La correcta señalización y construcción de infraestructura y mantenimiento de la misma es responsabilidad del dueño de la vía, dependiendo si es concesionada o no. En el caso de Bogotá, la directa responsable es la Secretaría de Movilidad, encargada de supervisar que se cumplan las normas nacionales e internacionales.
“Cada dueño de la vía tiene que señalizarla porque es parte de la integralidad de esta y garantizar una transitabilidad segura, es parte del principio de vías seguras (…) Si es una vía dentro de Bogotá, claramente es la Alcaldía de Bogotá a través de sus entidades como el IDU o la Unidad de Mantenimiento Vial, dependiendo las tareas que tienen”, explicó el funcionario al consultarle sobre la responsabilidad.
Sobre quiénes entonces deberían supervisar que los bogotanos puedan contar con vías seguras, teniendo en cuenta que pagan sus impuestos y demás, Lota agregó que la auditoría de seguridad vial la tienen que hacer las Secretarías de Tránsito.
“A nivel local el tener una buena infraestructura hace parte de la supervisión de las entidades de control: a nivel nacional la Superintendencia de Transporte, pero a nivel local lo debe hacer la autoridad de tránsito que, en este caso, es la Secretaría de Movilidad de Bogotá”, señaló.
Finalmente, el director de la Agencia Nacional de Seguridad Vial recalcó que reducir la accidentalidad de las vías es un compromiso de todos tanto de los conductores como de las autoridades. “Aquí todos tenemos que sumar, empresas, usuarios, las entidades locales, el Ministerio de Transporte, la Agencia de Seguridad Vial, y si no tenemos apoyos de las secretarias locales es muy difícil”.