¿Si hay soluciones a los eternos trancones de la vía Bogotá - La Calera?
Además de la ampliación de la carretera actual, las autoridades evalúan otras alternativas.
Los ciudadanos de La Calera se han quejado en las últimas semanas por los problemas de movilidad que se presentan en la vía que comunica al municipio con Bogotá, cuyos trayectos pueden tardar hasta dos horas.
Se estima que 40.000 vehículos se movilizan por este corredor de 6,5 kilómetros que actualmente se encuentra en un proceso de ampliación a un tercer carril con el que se busca mejorar la movilidad, además de crear ciclorruta y espacio público. Sin embargo, el desarrollo de las obras provoca mayores trancones, y el alto flujo vehicular retrasa la construcción.
La obra se entregará en diciembre de este año, según el concesionario encargado de la construcción. Pese a esto, muchos de los afectados aseguran que esta ampliación no sería suficiente, por lo que es necesario construir otras vías alternas que alivie la congestión.
-¿Qué tan viable es construir nuevas vías a La Calera?-
Además de la ampliación de la actual vía, las autoridades han evaluado otras posibles soluciones al problema. La primera es la recuperación de una carretera ubicada en el barrio El Codito, en el nororiente de Bogotá.
Esta vía conectaba a la ciudad con otros municipios de Cundinamarca, pero actualmente no se encuentra en las mejores condiciones. Esto debido a que el IDU adelantó labores de mantenimiento hasta el tramo que está dentro de los límites de Bogotá, porque el resto está en manos de La Calarea.
El problema es que desde el municipio aseguran que no cuentan lo los recursos suficientes para intervenir un tramo de carretera, por lo que esta alternativa se encuentra a la espera de una solución económica.
La otra opción que evalúan las autoridades es la creación de un nuevo corredor que se desprenda a partir de la calle 100 a la altura de la carrera 7. La nueva vía contaría con 6,5 kilómetros, de los que 3,5 serían un túnel. Para ello se requiere una inversión de $946.000 millones de pesos, y las obras durarían alrededor de 3 años.
Sin embargo, este proyecto no ha sido presentado al Concejo de Bogotá para su aprobación, pero la administración distrital espera incluirlo en el POT que entrará en discusión en el mes de diciembre. La iniciativa entraría a estudios previos y proceso licitatorio a partir del 2019.
Así las cosas, la única alternativa tangible hasta el momento es la actual ampliación. Si los plazos se cumplen, a finales de este años las obras habrán terminado y la movilidad en el sector tendría una mejora. Sin embargo, la población afectada reclama que con el tiempo la vía va a colapsar por el alto flujo vehicular, por lo que espera que se ponga en marcha otras alternativas.