Ejército rescató del reclutamiento forzado en Norte de Santander a cinco menores de edad
Los municipios de Tibú, El Tarra, Convención y Hacarí, son las regiones más afectadas por este delito.
En zona rural del municipio de El Carmen, tropas de la Segunda División del Ejército, rescataron a cinco menores que habían sido reclutados por integrantes de disidentes del frente 33 de las Farc,
El comandante de la Segunda División del Ejército, general Marcos Pinto, dijo a RCN Radio que "el resultado de una operación conjunta entre la Policía, Fuerza Aérea, Ejército e Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, que permitió recuperar a estos niños que han sido víctimas de la violación de Derechos Humanos por parte de disidentes del frente 33 de las Farc".
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Según las autoridades, en el operativo fue capturado un adulto, al parecer era la persona encargada de reclutar a los menores de edad y de entrenarlos en sus distintas prácticas y a quien le decomisaron material de guerra y de intendencia.
Los municipios de Tibú, El Tarra, Convención y Hacarí, son las regiones más afectadas por este delito, que se ha incrementado notablemente en los últimos meses, a pesar de la pandemia del Covid-19.
Las constantes denuncias, por parte de líderes sociales y la comunidad en general, en torno a esta problemática, ha generado el señalamiento y aumento de amenaza, por parte de estos grupos armados hacia esta población, que genera la salida de esta población ante las presiones que ejercen estos actores armados.
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Según el Ministerio del Interior, aproximadamente 210 municipios, de todo el territorio colombiano, se encuentran alerta máxima por el delito de reclutamiento forzado, donde incluso la población migrante es víctima de este flagelo.
El último hecho violento contra menores de edad se registró el pasado 27 de enero, en zona rural del municipio de El Tarra, en donde fueron asesinados dos hermanos de nacionalidad venezolana, entre ellos un menor de 15 años de edad y el otro de 18 años.
Según las autoridades, habían sido contratados como raspachines de coca y fueron asesinados para no cumplir con el pago por el trabajo realizado.