Fuertes protestas en Colombia por la muerte de Javier Ordóñez

Los manifestantes arrojaron pintura roja y piedras contra la fachada del edificio y un vehículo de la fiscalía que se encontraba en el lugar, al grito de "resistencia". La policía intentó dispersar la multitud con granadas de estruendo y gases lacrimógenos.

En medio de la agitación fue incendiada una motocicleta y atacado un vehículo del Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General, que es la encargada de esclarecer los hechos que condujeron a la muerte de Ordóñez.

Abuso y brutalidad

El abogado, de 46 años y padre de dos hijos pequeños, falleció en una clínica a la que fue trasladado luego de que dos policías lo doblegaran con brutalidad y el uso prolongado de pistolas eléctricas Táser en frente del edificio donde vivía.

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El caso ha causado profunda indignación en Colombia por la brutalidad de los agentes en este episodio, muy similar al del afroamericano George Floyd, que en mayo pasado fue estrujado por policías de Mineápolis (EE.UU.) y murió horas después en un hospital.

"Por favor, ya", "agente, le ruego", se le escucha decir a la víctima, ya inmovilizada en plena calle por los dos policías que intentaban arrestarlo después de un altercado, al parecer por estar bajo los efectos del alcohol.

Las imágenes, que estremecieron a los colombianos, fueron grabadas por testigos del abuso policial que incluso le pedían a los agentes que no le causaran más daño a la víctima, sin obtener respuesta.

La manifestación de esta tarde en Villaluz fue convocada en las redes sociales por personas que pedían ir de manera pacífica hasta el CAI del barrio para exigir justicia, pero la situación pronto se salió de control.

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Los desórdenes obligaron a los comerciantes del barrio a cerrar sus negocios y la Policía envió el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) para restaurar el orden.

La alcaldesa de la ciudad, Claudia López, denunció la acción como un "abuso policial". Y anticipó en Twitter que buscará "una reestructuración profunda y seria al interior de la policía", al tiempo que exigió "una condena ejemplar" contra los uniformados involucrados.

El presidente Iván Duque también rechazó "abusos (...) por parte de miembros de la fuerza pública" en un evento público en Bogotá. "Hemos visto hechos dolorosos el día de hoy", "a cualquier deshonra del uniforme tenemos que exigir que se apliquen sanciones oportunas", declaró el mandatario conservador.

De su lado, el ministro de Defensa, Carlos Holmes Trujillo, aseguró en una declaración a medios que "los dos agentes son ya objeto de investigación disciplinaria y penal".

Los desordenes se propagan 

Por la noche, los ataques a los CAI de la Policía se repitieron en otros barrios de Bogotá, como La Gaitana, La Soledad, Ciudad Berna, Ciudad Roma y Usme, donde manifestantes prendieron fuego a esas instalaciones, sin que se haya informado de víctimas entre los uniformados o los manifestantes.

Igulamente hubo desórdenes frente a puestos policiales de otras ciudades del país, como Medellín , Cali, Barranquilla e Ibagué.

Según la Secretaría de Seguridad y Convivencia de Medellín, durante las protestas, encapuchados atacaron la sede del Comando de la Policía Metropolitana, lo que obligó a enviar al lugar un escuadrón del Esmad.

El general Eliécer Camacho, comandante de la Policía Metropolitana, confirmó que además, estas personas lanzaron combustible, tratando de afectar la integridad de los uniformados que allí se encuentran. Dijo que fue necesario el uso del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), para controlar la situación. 

"Al observar que no hay intervención policial, estos ciudadanos rompen las vallas que rodean el comando para evitar que lo afectara, también rompen puertas, lanzan combustible para incendiar e ingresar al comando. Hay una reacción del Esmad solo para alejarlos del sitio, y evitar que fuera a tener una afectación más grave", añadió el oficial.
 

En Cali, manifestantes se tomaron una estación de autobuses urbanos y desplegaron una pancarta que decía: "Policía en todas partes, Justicia en ningún lado".

Con pancartas, gritos y cacerolazos decenas de personas realizaron una protesta en la calle 5 en inmediaciones al parque de Las Banderas, reprochando la forma en que murió el abogado Javier Ordóñez y exigiendo justicia por este hecho.

Aunque la manifestación se realizaba de forma pacífica, un grupo de jóvenes vandalizó un bus del Sistema de Transporte Masivo, MIO, con mensajes y se subieron al techo de este vehículo, aprovechando que quedó atrapado en medio de la multitud de personas. 

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De igual manera el CAI de la Policía ubicado a pocos metros, también fue vandalizado lanzándole piedras y con mensajes en sus paredes. 

Debido a los disturbios que se presentaron, hasta el lugar hizo presencia el Escuadrón Móvil Antidisturbios, Esmad, quien se enfrentó con algunos de los manifestantes.

En Barranquilla, entretanto, manifestantes también rechazaron la muerte de Javier Ordóñez y el exceso en el uso de la fuerza pública en procedimientos en contra de ciudadanos.

La actividad se inició frente a la sede centro de la Universidad del Atlántico y posteriormente los manifestantes se trasladaron hasta la Plaza de la Paz, frente a la Catedral de Barranquilla, en donde bloquearon por espacio de algunos minutos la operación de los buses del sistema Transmetro, los cuales tuvieron que desviar su ruta.

Los manifestantes pretendían en un principio adelantar la actividad frente al Comando de la Policía Metropolitana de Barranquilla, pero esto no fue autorizado por la institución.

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“Nos encontramos en la ciudad de Barranquilla protestando en contra de la violencia policial. Protestando porque la vida de todas las personas, de los jóvenes, de los campesinos y de los niños, valen. No es justo que una institución como la Policía Nacional opere con total impunidad, violando todos los protocolos de uso de la fuerza. Por eso estamos aquí rechazando el asesinato del señor Ordóñez en Bogotá”, indicó una manifestante.

Con pendones, pancartas, pitos y golpes de cacerola, los manifestantes, en su mayoría estudiantes, proclamaron consignas exigiendo a la fuerza pública respeto a la dignidad humana.

“El mensaje hoy a todos los colombianos es que salgamos a las calles, porque es hora de salir a defender la vida, a defender la paz y a defender nuestro país. Ya es hora de que la ciudadanía despierte y demostremos que el pueblo colombiano se respeta y lo vamos a hacer respetar con la movilización social”, agregó un asistente.

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En Ibagué también se registraron enfrentamientos entre la Fuerza Pública y un grupo de ciudadanos, después de un plantón que fue convocado para rechazar la muerte del abogado Javier Ordóñez. 

Así como en otras ciudades del país, en la capital del Tolima se convocó a una manifestación frente a las instalaciones de la Policía Metropolitana de Ibagué. Al inicio la protesta se desarrolló de manera pacífica, sin embargo, algunos manifestantes arrojaron objetos contundentes al comando, lo que llevó a la intervención del Esmad (policía antidisturbios). 

Luego de varios minutos de enfrentamientos, se comenzó a normalizar el orden público en la zona. El plantón, que inició a las 6:00 de la tarde aproximadamente, culminó en tranquilidad dos horas después, sin disturbios, ni hechos qué lamentar.

*Con reportería de Paola Agredo (Medellín), Nixon Carvajal (Barranquilla) y María Alejandra Rodríguez (Ibagué).