Gobernador indígena justifica retención de militares en Chocó
"Ellos hablan de secuestro, pero no se pronuncian de las heridas que han causado a la Guardia Indígena", dicen.
El gobernador del resguardo indígena El Consuelo en el Carmen de Atrato (Chocó), Alfonso Queragama, aseguró que la retención de nueve soldados del Ejército, no se trata de un secuestro.
El líder indígena cuestionó la forma de actuar de los militares en esa región del país, tras las denuncias de las comunidades nativas sobre atropellos cometidos por parte de la fuerza pública.
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“Esto no es secuestro. La verdad es que mientras que el coronel del Chocó habla del secuestro, ellos nunca se pronuncian de las heridas que han causado a la Guardia Indígena y eso sí no se dice”, indicó el vocero de esas comunidades.
El líder indígena señaló que él fue uno de los heridos en medio de la situación que se presentó en esa población en las últimas horas, mientras agregó que fue valorado en un centro asistencial de la zona por una herida leve en su cabeza.
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“Tenemos otro muchacho que tiene una herida en las costillas y nos dijeron que son heridas leves. Hasta el momento no tenemos personas graves”, apuntó.
El gobernador del resguardo indígena El Consuelo, Alfonso Queragama, advirtió que los militares estaban persiguiendo a la población desplazada.
“Para nosotros no es fuerza pública quienes persiguen a la población desplazada, ahí no se presentó enfrentamiento en el resguardo ni en la comunidad, solamente hubo un tiroteo entre el grupo desconocido con la Guardia, la verdad es que no se tuvo combates”, manifestó en RCN radio.
Enfatizó que “las comunidades indígenas no creemos que ellos sean de la fuerza pública, porque si lo fuera no harían daños ni desplazamiento a las comunidades, ellos cuidan”.
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El líder indígena reconoció que los soldados fueron amarrados inicialmente, pero explicó que posteriormente les soltaron de las manos, les dieron comida y los ubicaron en una casa para que pudieran dormir.
“Ellos amanecieron en la casa sin estar amarrados. Con el apoyo de la Personería se les brindó comida y colchonetas a los soldados y nos dijeron que había amanecido bien”, concluyó.