Institutos Financieros de Fomento y Desarrollo Territorial, el nuevo poder en Colombia para el desarrollo económico y social

Desde hace 60 años los Institutos Financieros de Fomento y Desarrollo Territorial, también llamados Infis, vienen generando desarrollo y mejoramiento de la calidad de vida de las comunidades más alejadas y vulnerables del país. Sin embargo, su arduo trabajo no había sido recocido hasta hace 8 años, cuando desde la gerencia decidieron posicionarse en la agenda gubernamental como una solución social para el país.

Así lo manifiesta Giovanny Ramírez Cabrera, presidente de Asoinfi y también gerente de Infivalle, quien hace poco fue invitado como panelista de la Cumbre de Finanzas en Común 2023, FICS, realizada por primera vez en Latinoamérica y donde se resaltó su trabajo estratégico enfocado en el beneficio social de las comunidades.

“Los Infis funcionamos como bancas subregionales de desarrollo y hemos empezado a crecer bajo el fondeo de las administraciones locales; son creados con el ánimo de que al territorio más alejado, no bancarizados, puedan llegar los recursos y ejecutar proyectos de manera rápida y eficiente que le permita a las regiones cumplir con el Plan de Desarrollo”, explicó Giovanny.

Actualmente, en Colombia hay 14 Infis que pertenecen a Asoinfi, los cuales apuntan a los objetivos del desarrollo sostenible, a la mitigación del efecto invernadero y al desarrollo económico.

“Por ejemplo, en el 2022 con Infivalle (Instituto Financiero para el Desarrollo del Valle del Cauca y el Pacífico Colombia) participamos en la ‘Asociación Latinoamericana de Bancas de Desarrollo para América Latina y del Caribe’ con un proyecto denominado ‘Rutas para la Paz’ con el que ganamos un concurso, además de un premio de Alta Gerencia entregado por la Presidencia de Colombia en la categoría de asistencia técnica. En el año 2023 volvimos a ganar un premio en Honduras con un proyecto que hizo sustitución de cultivos ilícitos en Policarpa, Nariño”, apuntó Giovanny, quien trabajó durante 17 años en la empresa privada y lleva 23 años en cargos públicos.

Trabajo de alcance internacional

La Comunidad internacional de Bancas de Desarrollo y la Alianza Francesa destacaron el trabajo y el modelo de los Infis, como un poder que beneficia a las comunidades que están en el último eslabón de las cadenas de las bancas de desarrollo.

“La cumbre fue muy importante porque tuvimos reuniones alternas con los presidentes de los bancos más importantes a nivel internacional, quienes nos dieron la ruta para tener en Colombia la ejecución de recursos para financiar proyectos de alto impacto”.

Una muestra de estos grandes proyectos que lideran los Infis es la ‘Granja Solar del Valle’ de Infivalle, que genera energía renovable en el Valle del Cauca con más de 78.000 paneles

solares que generan 28 megas de energía limpia, beneficiando a 24.000 familias y reduciendo enormemente los niveles de CO2.

Con el ánimo de reglamentar su accionar en beneficio del desarrollo del país, desde la presidencia de Asoinfi, Giovanny lidera el proyecto de Ley ante el Ministerio de Hacienda para incluir a los Infis en el estatuto orgánico del sistema financiero de Colombia.

“Los Infis han crecido para ser entidades sólidas y más seguras, tenemos algunos vigilados por la Superintendencia Financiera de Colombia y con la máxima calificación de riesgo crediticio AAA, como lo son Infivalle y el Idea de Antioquia. Este proyecto de Ley sería un logro grandísimo para el país, porque así el Gobierno nacional tendría otro vehículo para poder irrigar los recursos y beneficiar a mucha población expeditamente, con ejecución eficiente y segura”, manifestó Giovanny, quien recientemente terminó un doctorado en gerencia pública de política social con tesis laureada.

Los Infis le han apostado a proyectos de infraestructura vial, hospitalaria, deportiva, ambiental y social, de acuerdo a la especialidad de cada localidad y a las necesidades del país. Un ejemplo claro de esto es lo que hizo Infivalle durante la pandemia por Covid 19, que financió rápidamente con $200.000 millones al sector hospitalario para la compra de sangre, oxígeno y otros suministros que salvaron la vida de cientos de vallecaucanos.