Durante la campaña por el plebiscito por la paz, varias fueron las falsas cadenas que circularon en todo el país, sin embargo la que mayor reacción generó, señalaba que para apoyar el financiamiento de las bases guerrilleras los pensionados debían aportar el 7 por ciento de sus mesadas, gracias a una ley que se tramitaba en el congreso.
Clara López la ministra de Trabajo también tuvo que salir a desmentir las afirmaciones.
Temor y maltrato entre las temáticas más compartidas
Andrés Nieto, investigador de la Universidad Central, destaca que las cadenas “al generar un tipo de miedo o zozobra entre la ciudadanía, terminan replicándose sin mayor contraste o verificación de la fuente”
La utilización del censo electrónico promovido por el DANE a principios de año como una herramienta para sumar votos electrónicos de cara a las elecciones presidenciales en nuestro país, o la posibilidad que tenía la selección Colombia de pasar a cuartos de final del mundial de futbol porque la selección Inglaterra hizo dos cambios no permitidos en el extra tiempo, se convirtieron durante 2018 en las cadenas de mayor difusión junto con un eclipse de sol apocalíptico.
El investigador Nieto, destaca que “todo lo relacionado con menores de edad, abuso sexual, explotación en términos laborales o la desaparición de los menores, así como lo relacionado con el maltrato de animales de compañía y con desfalcos o nuevas formas de hurto”, son las temáticas de las falsas cadenas más difundidas.
La falsa cadena en whatsapp que el fin de semana terminó con el asesinato de una persona, en el sur de Bogotá, ha generado el inicio de una serie de campañas de prevención por parte de las autoridades para restarle credibilidad a estos mensajes y para hacer conciencia sobre las consecuencias legales que puede traer difundir una información que no corresponde con la verdad.
“Cuando la información que se difunde por redes sociales tiene alguna fotografía de una persona o un video que involucre la identidad directa de una persona con algún tipo de acusación, esta persona podría estar siendo víctima de injuria o calumnia y quien difunda esta información también entraría en esta tipificación”, puntualiza Nieto.
Investigaciones de la Policía y de la Fiscalía, han determinado que algunas de las falsas cadenas difundidas en Colombia, provienen de países como el Salvador y Costa Rica, debido a que los contextos sociales de los tres países son parecidos y por esa razón logran generar credibilidad entre la ciudadanía.