Nuevo megacolegio en Bucaramanga no se puede usar por fallas estructurales
En el proyecto se invirtieron $5.800 millones
Seis años completó un megacolegio sin poderse utilizar en Bucaramanga ante las fallas estructurales que presenta. En la obra se invirtieron $5.800 millones.
Se trata del plantel educativo Villas de San Ignacio al norte de la ciudad el cual desde el momento que se construyó, hace diez años aproximadamente, se recomendó ubicarlo en otro lugar porque en el lugar había una falla geológica.
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Sin embargo, esas recomendaciones al parecer no fueron tenidas en cuenta y la obra avanzó.
Al final el proyecto se culminó y se puso en funcionamiento, pero al poco tiempo aparecieron las primeras grietas como consecuencia de las fallas estructurales que previamente se habían denunciado.
Ante esas complicaciones las autoridades en Bucaramanga decidieron trasladar a los 1.300 estudiantes a otro plantel educativo y se dejó la estructura abandonada.
Sin embargo, el año pasado se confirmó la destinación de $2.800 millones para adelantar obras de mitigación consistente en corregir desplazamientos verticales y horizontales que tenía el colegio, por lo menos así lo confirmó la secretaria de Infraestructrura, Fanny Arias.
La funcionaria indicó que además se hizo un reforzamiento en el bloque C se instalaron pantallas y vigas para evitar el desplazamiento horizontal.
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Pese a ello la edificación no se ha podido utilizar y los estudiantes siguen recibiendo clases en otro colegio e incluso se construyó un nuevo colegio cerca, denominado La Inmaculada.
Al respecto el alcalde, Manuel Francisco Azuero, indicó que para él lo mejor es adecuar las instalaciones, en caso que se pueda, para otra finalidad.
Por eso, dio la recomendación de dejar la decisión en manos del próximo mandatario, aunque la preocupación sigue siendo la elevada inversión que se hizo en el colegio Villas de San Ignacio y el cual pasó a ser una posible solución a un inconveniente para los jóvenes del norte de Bucaramanga.