Sacerdote exorcista murió por covid-19
Se trata del párroco Julio Jiménez, de la iglesia Sagrado Corazón de Jesús de Bucaramanga.
El sacerdote Julio Jiménez, quien hacía parte de la parroquia Sagrado Corazón de Jesús, murió a causa de la covid-19. El párroco permanecía en la Unidad de Cuidados Intensivos.
El padre Jiménez era el encargado por la Arquidiócesis de Bucaramanga para realizar exorcismos en la ciudad. Tenía, además, una misión importante en iglesias vecinas como Pamplona, Málaga, San Gil, entre otras.
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"Era un gran jesuita y sacerdote. Tenía 46 años dedicado al sacerdocio en pleno y prestaba un servicio especial con la comunidad. Además, se dedicaba a enseñar a jóvenes, acompañamiento de laicos, y era un gran ser humano con una hoja de vida intachable", dijo el padre Misael Meza, párroco de la iglesia Sagrado Corazón de Jesús.
Una de las grandes incertidumbres de la comunidad era si el sacerdote Jiménez se habría contagiado en una de sus sesiones espirituales, a lo que sus compañeros más cercanos manifestaron que no: "Por su avanzada edad, tenía 75 años, se encontraba en confinamiento total desde el mes de marzo".
"Creemos que se contagió entre algunas personas que le pidieron una dirección espiritual en el mes de diciembre, y en la parte interior del lugar donde atendía a las personas tal vez alguna se encontraba sin tapabocas y portaba el virus, porque él estaba resguardado y protegido, pero había personas que iban a visitarlo", explicó el padre Mesa.
Ahora, el trabajo de la Arquidiócesis de Bucaramanga será escoger a un párroco con las mismas virtudes y experiencia del párroco Jiménez para continuar con estas sesiones espirituales, debido a que en la ciudad era muy reconocido, al igual que en la iglesia católica.
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Ante la pandemia de la covid-19, la Arquidiócesis ha dado instrucciones muy claras a los párrocos que tienen a su cargo iglesias católicas para que se cumplan con los protocolos de bioseguridad establecidos para evitar aglomeraciones y contagios por el virus.
Con el fallecimiento del sacerdote Jiménez ya son tres párrocos que han fallecido por la covid-19 en Bucaramanga.