Víctimas de las lluvias en Lloró están regresando a sus casas en ruinas
Algunas dicen que no les han garantizado otro terreno para asentarse.
El censo adelantado por los organismos de socorro da cuenta de por lo menos 35.000 personas que perdieron todo en 15 municipios chocoanos afectados por las precipitaciones de las últimas semanas.
La zona más afectada es el corregimiento de Boraudó, en el municipio de Lloró, que quedó inundado en su totalidad. El defensor regional del pueblo, Luis Murillo, aseguró que pese a que varias familias fueron evacuadas y llevadas a los albergues dispuestos por las autoridades, algunas personas están regresando a sus casas inundadas por temor a que les roben lo poco que les quedó.
"Estuvieron un tiempo allá, pero las personas se devolvieron y muchos siguen en sus casas caídas. Es un arraigo que tienen las personas a la cercanía con el río, que les da todo porque los servicios públicos son insuficientes", dijo Murillo.
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El defensor regional explicó que otra de las razones por las cuales se complican las labores de evacuación es que la comunidad no ve acciones claras de las autoridades que les garanticen estabilidad en otro terreno.
Pocos días después de ocurrida la emergencia en Boraudó, el gobernador Ariel Palacios dijo que desde el 2015 se realizó la compra de un terreno para el traslado de esta comunidad. Sin embargo, no se ha hecho efectivo y los pobladores se ven afectados con cada temporada de lluvias.
El defensor Luis Murillo aseguró que, durante la última emergencia, hasta la sirena que avisa a la comunidad sobre riesgos quedó inundada, lo que complica aún más advertir sobre nuevas alertas.
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Luego de una visita a la zona, el Defensor del Pueblo, Carlos Camargo, emitió un comunicado para pedir la reubicación urgente de este asentamiento debido a que no será la única emergencia a la que se verán enfrentados sus pobladores.
Los habitantes del corregimiento "viven en un estado de zozobra y han manifestado la existencia de un lote de terreno que cumple con los requisitos específicos para reasentamiento. Es decir, se tienen medidas de reducción del riesgo que debieron ser ejecutadas oportunamente, dando lugar a evitar pérdidas humanas y materiales como las que se presentan en el evento natural que hoy afecta la región", dijo Camargo.