Yerry Mina se quedó sentado en agónico triunfo de Barcelona ante Alavés
El colombiano estuvo entre los emergentes. Coutinho fue titular. El juego terminó 2-1 gracias a la remontada liderada por Messi y Luis Suárez.
El Barcelona sufrió ante el Alavés, que mantuvo el tipo en el Camp Nou durante setenta minutos pero terminó por claudicar ante el arreón final azulgrana, que no afloja en la carrera por el liderato de LaLiga Santander y al que solo le amenaza, de lejos, el Atlético Madrid, que se reencontró con el triunfo en el choque ante el Las Palmas.
La sesión fue propicia una vez más para el cuadro de Ernesto Valverde. Jornada a jornada sus perseguidores caen uno tras otro. Solo el Barcelona prolonga partido a partido una estabilidad y una inercia ganadora que le mantiene al alza.
El Atlético se recuperó. Pero tuvo un traspiés el pasado fin de semana. Está a once puntos. Y el Valencia, que pretendía formar parte de la pelea y discutir, al menos, la segunda plaza al combinado rojiblanco, ya está más pendiente de resguardar el tercer lugar, al que se aproxima el Real Madrid. El equipo de Marcelino García está a seis del Atleti y a trece del Barcelona.
El cuadro de Ernesto Valverde padeció más de lo esperado ante el Alavés, que ya dio la campanada en el Camp Nou el pasado año. Con ese talante se plantó también en esta ocasión. Incluso vio cerca el objetivo de puntuar al tomar ventaja en el marcador con el gol del sueco John Guidetti en el 23. El líder no empezó a enderezar la situación hasta el 72, con Luis Suárez.
La sexta victoria seguida llegó a ocho del final, en un libre directo transformado por Leo Messi, que salió otra vez al paso para sacar del apuro a su equipo.
El Atlético Madrid reforzó la segunda plaza con un triunfo firme ante el Las Palmas, que no termina de salir del pozo. Fue al contraataque como el cuadro de Diego Pablo Simeone se reencontró con el triunfo después de los tres contratiempos consecutivos sufridos en las últimas fechas. El empate contra el Girona la semana pasada y el doble revés sufrido contra el Sevilla que le echó de la Copa.
Fue con tres goles de contragolpe en la última media hora como el cuadro rojiblanco solventó su compromiso. Tantos de Antoine Griezmann, Fernando Torres y Thomas Partey, que echaron por tierra la resistencia isleña, que solo mantuvo el tipo durante una hora.
Fue una victoria esencial para el Atlético, que reafirma sus expectativas y que le asienta en el segundo puesto, beneficiado por la derrota ante el Real Madrid del Valencia, al que supera ya en seis puntos y a la espera de algún tropiezo del Barcelona para aferrarse a cualquier atisbo de opción hacia el liderato del torneo.
El conjunto rojiblanco está instalado en un objetivo lejano este año para el Sevilla, distanciado aún más de los puestos de Liga de Campeones después de que el Getafe le arrebatara dos puntos en el Sánchez Pizjuán en el tiempo añadido.
El equipo madrileño arrancó un empate (1-1) en la prolongación del partido, con tanto de Ángel Rodríguez, y dejó helado al bloque sevillista, que se veía con los tres puntos después del gol marcado por el colombiano Luis Muriel cuando revolucionó el juego de los suyos en la segunda mitad.
El paso al frente en la Copa del Rey y la victoria en Cornellá ante el Espanyol avistaban una recuperación que fue incapaz de rubricar el plantel de Vincenzo Montella con el Getafe. Sin un juego brillante tuvo más ocasiones que el rival. Pero el tanto de Ángel afeó su hoja de servicios en la jornada.
El Sevilla, anclado en la sexta plaza, pierde de vista al Villarreal, sexto con 37, y al Real Madrid, cuarto con 38 y un partido menos.
El Leganés, sin embargo, sí prolongó la dinámica copera. Supo cambiar de registro. Aparcar la euforia de la Copa y trasladar a la Liga sus buenas sensaciones. Demostró el conjunto pepinero que no vive solo de un día de gloria y ante el Espanyol exhibió oficio para sacar los tres puntos, desplazar de la tabla al conjunto catalán y asentarse en una zona cómoda.
El partido redondeó una semana para el recuerdo. Completó su clasificación para las semifinales de la Copa del Rey después de eliminar al Real Madrid con un triunfo en el Santiago Bernabéu con una importante victoria liguera.
Asier Garitano rotó con pocos miembros en su once de la heroicidad copera. Sin embargo, aunque cambiaron las piezas no se modificaron ni la actitud ni el planteamiento conscientes los jugadores de que no aprovechar sus oportunidades supone dejarle el lugar a otro.
El infortunio de Borja Hermoso, que marcó tres goles aunque dos en su propia portería, lastró al Espanyol, siempre por debajo en el marcador. El primer autogol del zaguero visitante fue a los diez minutos aunque Marc Navarro empató al inicio de la segunda mitad. Miguel Guerrero volvió a adelantar al Leganés a la hora de juego. El partido quedó sentenciado con otro tanto en su meta de Hermoso, que anotó también el segundo del Espanyol, pero a solo dos minutos del cierre.
Con información de EFE