Elecciones 2018: las propuestas económicas que han puesto a debatir a los candidatos
A pesar de que se ha abordado el tema económico, otros temas han generado más polémica.
Mantener el rumbo de la economía será una de las tareas del candidato que resulte ganador de las elecciones presidenciales colombianas, un asunto que sin embargo ha pasado de puntillas por la campaña electoral.
Con la atención de candidatos y electores centrada en el futuro del acuerdo de paz con las Farc y la discusión sobre el riesgo de que el país se convierta en "una segunda Venezuela" si gana el izquierdista Gustavo Petro, los temas económicos han quedado relegados.
Una de las mayores polémicas la ha protagonizado justamente Gustavo Petro, candidato del movimiento Colombia Humana y segundo en las encuestas de intención de voto, quien promueve un cambio de modelo para que el país reduzca su dependencia económica de la extracción minera y petrolera.
En su opinión, esta actividad puede ser sustituida por exportaciones de productos del campo, entre ellos el aguacate, cuyo cultivo, dijo, podría generar "dos millones de puestos de trabajo rurales y medio millón industriales", contra 50.000 de la industria del crudo.
Pero más allá de lo anecdótica que pueda resultar esta propuesta, los demás candidatos han dejado claro que no comparten los planteamientos económicos de Petro, como el de aumentar los impuestos a los latifundios para forzar a los propietarios a vender sus tierras, porque eso ahuyentaría la inversión extranjera.
En este sentido el programa del exvicepresidente Germán Vargas Lleras, del movimiento Mejor Vargas Lleras, promete, en caso de ganar las elecciones, generar las condiciones para que la economía crezca el 5 % anual, la generación de 1,2 millones de empleos formales en cuatro años y la reducción de impuestos.
La economía colombiana creció el año pasado un 1,8 % y en el primer trimestre de este año se expandió el 2,2 %, un ritmo que está por debajo de su capacidad real pues en 2014 logró un 4,4 %. Para conseguir su objetivo, Vargas Lleras propone "medidas estructurales" como "reducir al 30 % la carga tributaria para los negocios" con el fin de atraer más inversión, de la que dijo que necesita un "ambiente amigable".
La reducción de impuestos para las empresas está también en la cartilla del uribista Iván Duque, del Centro Democrático, que lidera todas las encuestas de intención de voto. Entre sus propuestas está la de diez años de exención de impuesto de renta a inversiones productivas en el campo que generen un mínimo de empleos formales. Igualmente defiende la reducción del gasto público pues considera que el gobierno del presidente Juan Manuel Santos "hizo del derroche la base de su política económica".
"Asumo el reto de recuperar la economía colombiana, haciéndole una reforma al Estado, enfrentando la corrupción y la evasión (...) Vamos a apostarle a la micro, la pequeña y la mediana empresa", dijo el domingo en su cierre de campaña en Bogotá.
Entre sus propuestas está también la de incentivar la innovación, el emprendimiento y las industrias creativas, cuyo potencial destacó en dos libros sobre la "economía naranja" que escribió como senador.
Sergio Fajardo, tercero en los sondeos y candidato de la Coalición Colombia, de centroizquierda, también considera viable un tratamiento tributario especial para las micro, pequeñas y medianas empresas con el fin de incentivar su formalización.
También defiende una mejora de la eficiencia del aparato productivo y propone la creación de 1,5 millones de empleos en cuatro años. "Nuestro reto es que la lucha contra la corrupción debe revertir en por lo menos un punto del PIB anual adicional de recaudo tributario, a más tardar en el tercer año de gobierno", asegura en su programa.
Por su parte, Humberto de la Calle, del Partido Liberal, quiere implantar "un plan de choque en infraestructura y vías terciarias" para combatir el desempleo entre los jóvenes e impulsar la formalización laboral. "Necesitamos un Estado más eficaz y más sencillo que promueva la formalización y no que la frene" lo que, en su opinión, ahoga a las pequeñas empresas.
Uno de los asuntos que tendrá que abordar el próximo presidente es la reforma del sistema de pensiones, que como en muchos países del mundo tiene un enorme déficit, pero todos coinciden en que ese paso debe darse sin aumentar la edad de jubilación ya que una propuesta de ese tipo es altamente impopular en época electoral.