Mujeres trabajan más en la informalidad que los hombres en Colombia

En el análisis de los niveles sobre la informalidad por géneros a nivel nacional, las mujeres son las más afectadas con el  49.03% mientras que los hombres reportan 45.5%, una diferencia de cuatro puntos porcentuales que indica que las acciones orientadas a la equidad de género no han sido suficientes.

El informe lo evidenció el presidente de la junta directiva de Asocajas Ernesto Herrera en el marco del Congreso Nacional de Asocajas en Cartagena, a partir de resultados recientes del Dane que además indican que los porcentajes entre hombres y mujeres son similares en las ciudades del país, exceptuando a Cartagena donde la mayor tasa de informalidad la registran los hombres con un 55.6% frente a un 54.6% de las mujeres.

“En algunos casos las altas cifras de informalidad en el género femenino se dan por las dificultades que encuentran las mujeres para adaptarse a las exigencias laborales sin dejar de lado las responsabilidades hogareñas o por la preferencia en el sector formal de contratar personal masculino aduciendo criterios de productividad o competencia”, Ernesto Herrera.

Sin embargo, y pese a este panorama, el Presidente de Asocajas indicó que el concepto de informalidad laboral ha ido evolucionado a través del tiempo desde focalizarse en las pequeñas unidades productivas de bienes y servicios no registradas a hacerlo con los trabajadores que no cuentan con las garantías laborales establecidas por las leyes sin diferenciar si están vinculados a empresas formales o no.

Según la Organización Internacional del Trabajo, cerca del 60% de la población activa del mundo trabaja en el sector informal de la economía, la misma entidad señala que el 93% de los trabajadores informales se encuentran en los países emergentes, lo que demuestra una relación directa de la tasa de informalidad con los niveles de desarrollo económico de los países.

Según el informe del Dane para el trimestre junio – agosto de 2018 la tasa de informalidad en Colombia se mantiene por debajo del 50%.

El mayor nivel de informalidad se encuentra en las zonas rurales del país que representa el 23 % de la población nacional y pese a tener la tasa de desempleo más baja con el 5.2%, presentan cifras de informalidad por encima del 80%, una realidad que está directamente relacionada con el poco acceso educativo y el impacto en el crecimiento y desarrollo económico de esta población.