Italiano mostró cómo "lo estafaron" en Cartagena: ahora vendedores lo quieren demandar
El turista italiano mostró como en media hora le sacaron $150.000 mientras quería estar sentado tranquilo en la playa.
En Cartagena se ha vuelto común escuchar denuncias de turistas indignados que se quejan por precios altos en paquetes turísticos, comida a la orilla de la playa, costosas limonadas y otros servicios.
Si bien la situación siempre se denuncia en redes sociales, y constantemente los turistas se quejan del acoso y asedio de los vendedores y artistas en la capital de Bolívar, los hechos siguen presentándose y afectando el turismo de la ciudad.
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Precisamente, este fin de semana se ha viralizado un video que ha generado mucha controversia, pues un italiano califica como estafa lo que le sucede a los turistas en las playas de Cartagena.
El reconocido creador de contenido italiano, Federico Zompichiatti, mejor conocido como Zazza, ha generado polémica tras compartir un video en el que denuncia haber sido estafado por vendedores y artistas locales en la famosa Playa de Bocagrande, en Cartagena.
Zazza, conocido por su contenido audaz en YouTube, decidió llevar a cabo un experimento social en la Playa de Bocagrande para analizar la situación de estafas a los turistas en este destino caribeño. En el video, compartido con sus seguidores, relató cómo desde su llegada a la playa ya le habían cobrado 10.000 pesos por una simple pregunta, revelando así una realidad que muchos turistas enfrentan al visitar la zona.
"Probablemente te estarás preguntando por qué un canal que se dedica a mostrar zonas peligrosas enseña una playa tan bonita, pues, la respuesta es que esta playa no es peligrosa en término de violencia, pero sí que es peligrosa para tu cartera, ya que aquí las estafas a los turistas están a la orden del día. He intentado actuar como un viajero sin experiencia, que no sabe decir que no y que se deja llevar por la situación y el resultado ha sido impresionante", dijo el italiano.
En ese sentido, dijo que si bien no lo robaron, es tal el asedio, que si un turista no sabe manejar la situación puede terminar gastando mucho dinero.
"Es verdad que me han ofrecido sus servicios y yo lo he aceptado, no me han quitado el dinero del bolsillo, pero si se descuidan un poquito o no saben decir que no, puede ser que les quiten $100, $200, $300.000 pesos en nada, en media horita", contó Zazza.
Incluso, mostró cómo varían los precios dependiendo el turista, ya que alguien le ofreció alquilarle un jetsky en $180.000, pero al quejarse le dijo que se lo dejaba en $120.000.
Asimismo, dijo que en media hora que estuvo en la playa se tuvo que gastar $150.000 pesos en pocos minutos debido a la presión de los vendedores, músicos, masajistas y hasta un mimo.