El descache de Mercedes-Benz al citar al dalái lama en Instagram
La compañía debió pedir disculpas a China.
El fabricante de automóviles alemán Mercedes-Benz provocó una polémica en China por citar al dalái lama, sumándose a una lista de firmas extranjeras, como Zara y Marriott, que entraron en conflicto con Pekín por cometer errores sobre Tíbet, Hong Kong o Taiwán, cuestiones sensibles para el gobierno comunista.
El diferendo lo provocó un mensaje aparentemente inofensivo que Mercedes, del grupo Daimler, publicó el lunes en la red social Instagram. En la fotografía se ve una berlina de la marca con la frase "Observe una situación desde todos los ángulos, ¡abrirá su mente!", que Mercedes atribuyó explícitamente al jefe espiritual tibetano.
Aunque el acceso a Instagram está bloqueado en China, el mensaje desencadenó furiosas reacciones con tintes nacionalistas en las redes sociales chinas.
El gobierno chino dice que el dalái lama, premio nobel de la Paz, es "un lobo disfrazado de monje" y "un separatista", a pasar de que el líder tibetano, refugiado en India, asegura que solo reclama una mayor autonomía para la región china del Tíbet.
Ante la controversia, Mercedes retiró de Instagram el mensaje y el martes publicó sus disculpas en mandarín en la plataforma china de microblogs Weibo.
"Somos conscientes de que herimos los sentimientos del pueblo de este país", reconoció, y afirmó "lamentar profundamente" el haber "publicado informaciones extremadamente incorrectas" y estar determinado a "profundizar [su] conocimiento de la cultura china"."Enemigo del pueblo chino" Mercedes-Benz no puede permitirse renunciar a China, su primer mercado y donde sus ventas aumentaron 26% el año pasado.
A pesar de las excusas del fabricante, la versión digital del Diario del Pueblo, el portavoz del Partido Comunista, le dedicó un encendido editorial este miércoles.
"Mercedes-Benz, ustedes se han convertido en un enemigo del pueblo chino", considera el texto, que acusa al fabricante alemán de "obtener grandes beneficios" en China, primer mercado automovilístico mundial, al tiempo que "humilla" a su pueblo.Varias empresas occidentales fueron señaladas en las últimas semanas por ignorar la línea oficial de Pekín sobre su soberanía, ya sea sobre el Tíbet (región bajo su tutela desde 1950), Hong Kong (excolonia británica con gran autonomía) o Taiwán (isla independiente de facto pero reivindicada por Pekín).
Hace ya tiempo que los artistas saben lo caro que sale cruzar líneas rojas. Al grupo de rock británico Placebo se le impuso el pasado verano boreal "una prohibición vitalicia" de actuar en China, tras haber publicado en Instagram una foto del dalái lama.
La comunicación de las empresas es vigilada de cerca.
La marca española Zara y la compañía aérea estadounidense Delta Airlines fueron señaladas en enero por haber incluido sus sedes en Hong Kong y Taiwán en las listas de "países", como si se tratara de entidades independientes.
A mediados de enero, las autoridades de Shanghái cerraron temporalmente el sitio en internet en mandarín del grupo hotelero Marriott que, en un cuestionario en línea, presentaba el Tíbet como un país distinto.
Marriott reconoció su error, pero volvió a complicar la situación cuando una de sus cuentas de Twitter en el extranjero indicó que le gustaba un tuit de una organización que apoya la independencia del Tíbet, lo que motivó nuevas amonestaciones.
Por su parte, la cadena japonesa de productos de papelería e interior Muji fue duramente criticada porque un mapa de China de su catálogo omitía un archipiélago objeto de un duro diferendo territorial entre Pekín y Tokio.
La administración china le ordenó "hacer pedazos" los "mapas erróneos", según la cancillería. Japón reaccionó con una queja oficial ante Pekín.
La portavoz de la diplomacia china, Hua Chunying, subrayó recientemente: "Recibimos con mucho gusto a las empresas extranjeras, pero todas deben respetar la soberanía y la integridad territorial del país".
Con información de AFP