Talibanes estarían yendo "casa por casa" en Afganistán buscando a aliados con EE.UU.
Linda Tom, portavoz de la ONU, aseguró en La FM que medio millón de personas han sido desplazadas y pidió proteger a las mujeres y niñas.
Según un documento confidencial de la ONU publicado en las últimas horas, los talibanes van "casa por casa" buscando a detractores y personas que han trabajado para las fuerzas extranjeras y a sus familias, lo que ha multiplicado el miedo y la desconfianza en las promesas de tolerancia y reconciliación hechas por los talibanes.
El informe, redactado por un grupo de expertos en evaluación de riesgos de la ONU, dice claramente que los talibanes tienen "listas prioritarias" de personas que desean arrestar.
En entrevista con La FM, Linda Tom, portavoz de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de la ONU en Afganistán, dijo que han recogido versiones sobre lo que están haciendo los talibanes, y están seguros que se necesita proteger a la población afgana, sobre todo a los más vulnerables: las mujeres y las niñas.
"No tenemos número concreto de gente que se quiere ir. Las fronteras están en situación sumamente complicada y hay algunas cerradas; hay un movimiento interno dentro del país, donde medio millón de personas han sido desplazadas", aseveró.
Pese al conflicto y el temor que se vive en Afganistán por el control de los talibanes, la portavoz de la ONU aseguró que no tienen intención de irse porque su labor, precisamente, es ayudar a las personas.
“Hago parte de la comunidad humanitaria que se quiere quedar en Afganistán para ayudar a quienes lo necesitan. No vamos a abandonar a la gente de Afganistán, vamos a seguir ayudando y siguiendo los principios humanitarios que nos rigen", agregó.
Entrevista en La FM con Linda Tom, portavoz de la ONU en Afganistán
¿A quiénes buscan los talibanes?
En primera línea están quienes ocuparon puestos de responsabilidad en las fuerzas armadas afganas, la policía y las unidades de inteligencia.
Desde que tomaron el poder en Kabul el domingo y en la mayoría del país, los talibanes intentan convencer al mundo y a los afganos de que no ejercerán el poder de la misma manera que entre 1996 y 2001, cuando dirigieron el país. En aquel momento impusieron una visión extremadamente rigurosa de la ley islámica, que penalizaba especialmente a las mujeres.
Pero este informe de la ONU muestra una situación muy diferente. "Toman por objetivo a las familias de quienes se niegan a entregarse y las castigan basándose en la sharia" o ley islámica, declaró a la AFP Christian Nellemann, director del Centro noruego de análisis globales, el grupo de expertos a cargo de este informe.
"Tememos que las personas que han trabajado para las fuerzas estadounidenses, la OTAN y sus aliados así como sus familias, sean torturadas o ejecutadas", agregó.
Los talibanes han insistido en que sus hombres no tienen autorización para entrar en los domicilios. "Algunas personas lo están haciendo, tal vez por ignorancia (...) Nos da vergüenza", admitió en Twitter uno de sus responsables, Nazar Mohammad Mutmaeen.
"Persiguen para vengarse, sobre todo a los oficiales de los servicios de seguridad y la inteligencia", denunció el exministro afgano de Interior, Masud Andarabi, a la radio británica Times. "En las últimas 24 horas han extendido y acentuado sus búsquedas", dijo Andarabi, que está escondido y su propia casa fue registrada tres veces desde hace cuatro días.
Este viernes, la cadena pública alemana Deutsche Welle informó de que el familiar de un periodista que trabajaba para ellos en Afganistán y que ya se encuentra en Alemania fue asesinado por los talibanes.
Por su parte, el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ, por sus siglas en inglés) denunció que los talibanes han registrado esta semana los domicilios de al menos "cuatro periodistas y trabajadores" de medios de comunicación y que hubo reporteros agredidos.
Especialmente dramático fue el llamamiento de la presentadora de la televisión afgana, Shabnam Dawran, a la que se le prohibió trabajar esta semana. "A todos los que me escuchan, si es que el mundo me escucha: por favor, ayúdennos porque nuestras vidas están en peligro", dijo en un video publicado el jueves.