Fiscalía investiga si vigilante Fernando Merchán Murillo, quien resultó muerto, mintió

La Fiscalía General de la Nación aseguró que está investigando si Fernando Merchán Murillo, vigilante que resultó muerto, les mintió.

De acuerdo con Luis González, director nacional de Fiscalías, hay "presuntas inconsistencias en lo que el señor Fernando Merchán Murillo le había dicho a la Fiscalía General de la Nación y lo que había consignado en libros de allí de este edificio".

De igual forma, el ente acusador señaló que la "Fiscalía no descarta ninguna hipótesis investigativa frente a muerte de vigilante en caso de menor de 7 años asesinada en Bogotá". González agregó que las autoridades están mirando por qué las cámaras de seguridad muestran unas horas y el vigilante anotó otras en la minuta.

La Fiscalía General de la Nación también aclaró que Fernando Merchán Murillo dijo en la carta que dejó que no quería volver a la cárcel porque estuvo detenido por microtráfico. "Perdónenme, no quería dañarle la Navidad a nadie, soy inocente, no quiero volver a la cárcel: Fernando", escribió el vigilante en la misiva.

Al margen de las declaraciones de González, las autoridades están observando siete cámaras de seguridad para completar las pesquisas. Una de ellas demostraría, según las investigaciones que se adelantan, que Fernando Merchán Murillo habló con Rafael Uribe Noguera en el parqueadero del edificio Equus (cra 4A 66-14) durante cinco minutos, situación que abre las dudas acerca de si el vigilante sabía qué estaba sucediendo con la niña Yuliana Andrea Samboni.

Otra imagen mostraría una discusión entre el vigilante y Francisco y Catalina Uribe Noguera, los hermanos del detenido, porque él no los dejaba ir al apartamento, al parecer con el argumento de que en el lugar no había nadie. “A esta hora entra la señora Catalina Uribe (hermana de Rafael Uribe) al apartamento 603, ella tiene las llaves. El apto está solo. Se encuentra de turno Fernando Merchán. También entra el señor Francisco Uribe, hermano del señor Rafael Uribe”, dice el registro, escrito por Merchán, cuando finalmente accedió a dejarlos seguir.