Fuerte regaño de juez al abogado de Aída Victora Merlano

Por escrito, el juez le respondió al abogado Rodríguez, que la diligencia se realizará en el horario previamente definido.

“Negar la solicitud de aplazamiento elevada por el doctor Guillermo Rodríguez, habida cuenta que la diligencia de acusación se citó desde el 14 de febrero de 2020 y el abogado recibió el mandato el 17 de febrero de la misma, es decir, que contó con el tiempo suficiente para prever cual situación de índole administrativa a efectos de poder celebrar el acto procesal”.

También agregó que “sumado a ello, indíquese que el mandatario cuenta con la facultad de sustituir, de manera que tiene la posibilidad de entregar el mandato a otro profesional del derecho que lo reemplace en este acto procesal sino puede asistir personalmente”.

Frente a la solicitud de preclusión interpuesta por el defensor de la hija de Merlano, el funcionario judicial respondió: “A su vez, recuérdesele que conforme a la jurisprudencia de la Honorable Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia las solicitudes de preclusión únicamente deben ser presentadas con fundamento en situaciones objetivas y además, pueden ser expuestas en cualquier momento durante la etapa de juzgamiento”.

En ese sentido, agregó el juez “de tal suerte que no necesariamente debe realizar la postulación en la diligencia de acusación sino que puede postergar dicho acto procesal a la etapa siguiente”.

El juez además le indicó al abogado Rodríguez que podría estar incurriendo en una vulneración de la ley e incluso le citó la jurisprudencia.

“En esa medida igualmente comuníquesele que su actuar podría considerarse como una clara vulneración a lo normado en el artículo 33 numeral 8° y 34 literal i de la ley 1123 de 2007”.

El funcionario judicial indicó que su actuar es un acto de mala conducta. “Finalmente, comuníquesele que de acuerdo con la reiterada jurisprudencia de la Sala Jurisdiccional Disciplinaria del Consejo Superior de la Judicatura, realizar aplazamientos a última hora es causal de mala conducta”.

LA FM conoció que la Fiscalía argumentará durante su exposición que Merlano Manzaneda habría sido la pieza clave dentro del plan que orquestó la excongresista para fugarse.

De acuerdo con la Fiscalía, la joven de 20 años “coordinó” todo el plan de fuga de su madre, señalando que mientras la exrepresentante a la Cámara se sometía a un procedimiento odontológico en un consultorio ubicado al norte de la capital de la República, ella hacía todas las gestiones para que el plan se cumpliera como se había diseñado.

“Aída Victoria Merlano Manzaneda realiza todas las gestiones para que, en el preciso momento, llegue una motocicleta al lugar y la recoja para emprender la huida. Adicional a eso, le suministró algunos elementos tales como teléfonos móviles para que ella pudiera culminar y llevar a satisfacción su plan de escape”, precisa uno de los apartes del documento de 22 páginas.

Odontólogo

La fiscal 12 Delegada para la Seguridad Ciudadana también acusará a Javier Guillermo Cely Barajas, el odontólogo que atendió Merlano el día en el que se registró su cinematográfica fuga, en la que utilizó una soga para escullirse del consultorio.

Sobre el odontólogo Cely Barajas, la Fiscalía señala en el escrito de acusación que “tenía conocimiento de que su paciente era una privada de la libertad”; además, reseña que su participación “fue determinante” en la fuga.

Establece la Fiscalía que Cely Barajas, garantizó que las condiciones del escape fueran las idóneas para que se pudiera fugar sin problema. También se considera, por parte de este ente, que el hijo menor de Merlano, fue “instrumentalizado” para apoyar el escape.